El Cosquín Rock 2023 (CR2023) que sucederá los próximos días 18 y 19 de febrero en Santa María de Punilla, anticipó sus novedades y detalles de una edición que promete la participación de todos los géneros musicales, gastronomía y el disfrute del paisaje serrano en un marco de respeto, inclusión, familia y cuidado del medio ambiente.
Entre las novedades, la organización anunció que quienes hayan adquirido sus abonos para los dos días, o entradas individuales, podrán disfrutar de la incorporación del Escenario de Montaña, que ocupará el centro del predio, con una programación de música pop/rock y electrónica.
Además, quienes tengan las entradas Fanatic podrán acceder a un sector de servicios y plataformas en todos los escenarios.
Otro punto destacado es que este año se suman Experiencias Gourmet, protagonizadas por el proyecto Non Barro, Cocina de Montaña, a cargo de los cinco reconocidos cocineros Paula Massuh, Dante Liporace, Ezequiel Gallardo, Mariano Pierini y la barwoman Cecilia Ojeda, quienes, unidos por la amistad, la montaña y el rock, brindarán una propuesta gastronómica y sensorial única.
Non Barro también incluirá las iniciativas Cocina de Experiencias, que permitirán al público vivir el arte cordobés con la curaduría de 220 Cultura Contemporánea, mediante el cual se montará un espacio planteado en tres ejes: el arte, el diseño y el pensamiento; y Cocina de Valor, una propuesta concentrada en la cocina de montaña que tiene como objetivo ofrecer un servicio respetuoso de la naturaleza: reducción del impacto ambiental al mínimo posible y utilización de materias primas e ingredientes que se encuentran en temporada y de productores locales.
Por otro lado, el festival contará con un nuevo sector montado sobre el margen oeste del predio, denominado Tomar & Beber, que contempla un espacio destinado a Le Dureau, cafetería a cargo de Belén Duró, que ofrecerá tres tipos de café de especialidad; la Vinatería, comandada por el emprendedor gastronómico Sebastián Gullo, quien propondrá un recorrido de 45 minutos por una variedad de vinos por copa de múltiples edades y latitudes; y la Vermutería 1786, una isla central dedicada a la coctelería.
Este año, para aprovechar el tiempo al máximo, se creó la app Pop Meals, desde la cual el público podrá comprar la comida y retirar los ecovasos en cualquiera de los puestos de cantina del predio, pagar seguro, retirar rápido y tener más tiempo para disfrutar el festival.
También estará el Mercado Pop que, como cada año, tendrá una amplia variedad de foodtrucks con comida apta para vegetarianos, veganos y sin TACC.
Desde hace años Cosquín Rock es un festival inclusivo, que además del lenguaje de señas en todas las pantallas, en esta edición contará con un nuevo ingreso 100% asfaltado, por donde las personas con discapacidad podrán acceder, previa habilitación a través de la web oficial.
La educación y formación de profesionales también estará presente en esta edición porque, en conjunto con el Instituto de Cultura Contemporánea, se convertirá en Festival Escuela, mediante lo cual en pleno evento se podrá aprender prácticamente producción, fotografía y gestión gastronómica de festivales.
Cabe destacar que el festival se propone reducir la huella de carbono, por lo cual esta edición va medir su impacto para avanzar en las medidas hacia una reducción sostenida en el tiempo. Además, va a compensar las emisiones participando del Programa de Reducción y Compensación de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero, de la Provincia de Córdoba. Vale destacar que existirá una fábrica de compost, donde los residuos orgánicos generados en el sector gastronómico serán transformados en abono y el público va a poder ver en vivo cómo se realiza el proceso desde el punto Ecosquin.
Vale recordar que quienes hayan adquirido sus pases deberán dirigirse a los centros de canje habilitados para evitar esperas los días del festival. Toda la información sobre los puntos habilitados está en www.cosquinrock.net.
