La “mentalidad de obstáculos” del empresario pyme limita significativamente la transformación del trabajo

Una investigación de la Universidad Siglo 21 revela limitaciones referidas a diagnóstico, inversión, medición y profundidad de las capacitaciones necesarias para adaptar a trabajadores a un puesto diferente

¿Cómo están ocurriendo las transformaciones del trabajo humano en las empresas argentinas? Sobre esto indagó un estudio de la Universidad Siglo 21 (US21) que afirma que los humanos no podrán ser reemplazados por máquinas.

Sobre una muestra de 760 empresas en Argentina, 80% de ellas pyme, se conocen nuevos datos sobre la relación entre el trabajo humano y el potencial reemplazo por tecnología. También los resultados advierten por limitaciones relativas a diagnóstico, inversión, medición y profundidad de las capacitaciones necesarias para lograr la adaptación de trabajadores a un puesto diferente.

Andrés Pallaro, director del Observatorio del Futuro de la Universidad Siglo 21 , que realizó el estudio , destacó conclusiones, “Lo que queremos mostrar, en primer lugar, es que más que un escenario distópico, la humanidad vive un proceso de oportunidad que está en los modelos de negocios, en los empresarios innovadores, en el Estado, capturarlo. Ahí tenemos debilidades, el estudio muestra que sigue habiendo una mentalidad de obstáculos en el empresario pyme a la hora de formar, por ejemplo dicen que es caro formar. La mayoría no tiene una metodología para ir midiendo en la empresa qué tareas concretas conviene dárselas a una máquina y cuáles conviene hacerlas fuerte con el equipo. Y a la hora de saber el estado y stock de habilidades de la gente, es decir qué sabe hacer un equipo, la mayoría no sabe definirlo”.

¿Cómo las empresas abordan la digitalización y la capacitación de sus colaboradores? Éstos son algunos resultados:

· Tres de cada 10 empresas se autoperciben como nuevas (recientes) o bien transformadas por el paradigma digital.

· La mayoría de las empresas participantes espera crecer en los próximos tres años en relación con su fuerza laboral, mientras que sólo 4,8% tiene la expectativa de reducir su planta de colaboradores.

· Nueve de cada 10 colaboradores se desempeñan en su actividad laboral bajo la modalidad exclusiva/full time.

· En el segmento de empresas nuevas o transformadas, tres de cada 10 trabajadores ya están desempeñándose bajo modalidades virtuales o híbridas. Este tipo de modelos parece no haber penetrado con relevancia aún en las empresas tradicionales.

Sobre la capacitación de trabajadores, el informe relevó las siguientes cifras:

· En el último año, 57% de las empresas ha realizado un diagnóstico sobre aquellas temáticas que requieren de capacitación.

· Los principales obstáculos que creen enfrentar las empresas a la hora de aplicar programas de capacitación están vinculadas con el tiempo improductivo que transcurre dentro de la jornada laboral de los colaboradores. Además, una buena parte de las capacitaciones es percibida como de costo económico elevado.

· A pesar de las barreras identificadas, tres de cada cuatro empresas argentinas aplican o han aplicado programas de capacitación y desarrollo para sus colaboradores.

“Puede que no esté faltando presencia de formación para los colaboradores en términos de cantidad o universalidad pero se advierten limitaciones significativas en todo lo que refiere a diagnóstico, inversión, medición y profundidad de las capacitaciones. Los datos demuestran que hace falta avanzar en un nuevo mindset (cambio de mentalidad) por los directivos de las empresas, especialmente las pymes, en cuanto a la inversión de tiempo y dinero para la formación continua de sus colaboradores, tema cada día más relevante en la construcción de resultados sostenibles para todos los modelos de negocios”, destacó Pallaro.

Presente y el futuro de la economía digital

Las empresas afirman en el estudio que las cinco skills (habilidades) más necesarias para el desarrollo de actividades son aprendizaje continuo; trabajo en equipo; planificación; claridad, escucha activa y comunicación; y asertividad. Entre los resultados destacados, se observan:

· Tres de cada cuatro empresas creen que en el futuro todos los trabajos tendrán, en alguna medida, tareas que realizarán máquinas o dispositivos tecnológicos, aunque la gran mayoría (67%), no dispone de una metodología para gestionar la creciente composición de tareas humanas y tecnológicas en las distintas posiciones laborales.

· El fenómeno de la sustitución de tareas humanas por tecnología tiene un alto impacto en las áreas de producción y administración (68% del total). Sólo 12,2% de las tareas humanas ha sido reemplazado por tecnología en el último año y las empresas esperan que ese porcentaje se eleve a 18,6% en los próximos tres años.

· El informe evidencia un crecimiento de nuevas posiciones relativas a los trabajos del futuro; 33% de las empresas manifiesta ya haberlas incorporado y 64% prevé sumarlas en los próximos tres años.

“Resulta interesante destacar que la sustitución tecnológica de ciertas tareas no está acompañada de una reducción de la dotación de personal, lo que nos permite afirmar que el trabajo humano no tiene un horizonte distópico. Esto tiene que ver con el paradigma del Tecno-Humanismo que, entendemos, tiene creciente vigencia para expandir el valor de las personas en el trabajo mientras se adoptan nuevas tecnologías” concluye Pallaro.

Finalmente, apuntó a las áreas de recursos humanos como las que deben pasar a estar enfocadas en bienestar y desarrollo de las personas. “Si las empresas no organizan bien estos temas, la gente se les va. Por ejemplo, no saben a quién darle nuevas funciones, no saben quién tiene más potencial y quién menos, necesariamente hay que crecer en ese tema. Es nuestra salvaguardia a futuro que la gente tenga más habilidades blandas, que sepa trabajar mejor en equipo, casi es la única esperanza de que este mundo lleno de tecnología nos lleve a un progreso mejor para todos”.