Según la investigación del IEF, estos microemprendimientos cordobeses aumentaron sus ingresos totales, tuvieron buena evolución de venta y ganancias, así como de personal ocupado / Por Natalia Riva – [email protected]
La transferencia tecnológica de las universidades a la actividad económica se conoce actualmente con el término spin off. En Córdoba, uno de los mecanismos dirigidos a producir esta transferencia de conocimiento es la Fundación para la Incubadora de Empresas (FIDE).
En este marco, un grupo de economistas del Instituto de Economía y Finanzas (IEF) perteneciente a la Facultad de Ciencias Económicas de la UNC, investigó sobre las principales características de los emprendimientos incubados en el marco de la incubadora de empresas. Para esto, realizó una comparación entre encuestas realizadas en 2007-2008 y este año con el propósito de mostrar su evolución, desarrollo y nivel de desempeño.
Entre las principales conclusiones, a las que tuvo acceso Comercio y Justicia, se destacan las siguientes: “Los resultados fueron bastante positivos, ya que todos los incubados o ex incubados que están insertos en el mercado, aumentaron su ingreso monetario nominal total, tuvieron una buena evolución de venta y ganancias, de personal ocupado y ninguno decreció en estas características”, explicaron Soledad Far y Celeste Sabagh, dos de las integrantes de la investigación.
Concretamente, según el estudio, todos los emprendedores aumentaron su nivel de ingreso familiar total en valor monetario nominal. Otro dato es que todos los emprendimientos reencuestados sobrevivían en 2010 y mostraron alto desempeño.
En lo que respecta al nivel educativo de los microemprendedores incubados en la ciudad de Córdoba, se concluye que es claramente superior al nivel académico de los emprendedores que trabajan por su cuenta. Así, 87 por ciento de los incubados alcanzó un título terciario y hasta universitario (25 por ciento posee posgrados) y sólo 29,8 por ciento de los no incubados tiene este tipo de capacitación.
A su vez, no se encontraron emprendedores con microemprendimiento incubado de nivel educativo por debajo del secundario completo.
¿Y las dificultades?
La investigación también avanzó sobre las principales dificultades que enfrentan actualmente los “incubados”. En este sentido, alrededor de 70 por ciento manifestó tener problemas de comercialización de sus productos o servicios. Más aún, 50 por ciento presentó inconvenientes en cuestiones impositivas y, como dato a destacar, más de 80 por ciento expresó tener dificultades en la obtención de financiamiento.
Comercialización y clientes
En lo que respecta a los canales de venta de este tipo de negocios, existe unanimidad en que todos comercializan a través de venta directa. Además, 37,5 por ciento utiliza otros canales de comercialización; 25 por ciento trabaja, además, por pedido o encargo y mediante ventas por Internet y sólo 10 por ciento realiza sus ventas en local o puesto propio. Ninguno utiliza el delivery o franquicias como canal de comercialización. “Algo que llamó la atención es que hubo un importante cambio en la estructura de clientes de las empresas incubadas de hace tres años y hoy”, explicaron las economistas. Así, el dato es que en 2007, setenta y nueve por ciento de los clientes de los microemprendimientos era consumidores finales del barrio o de otras zonas y, en 2010, ochenta y ocho por ciento de los clientes de estas empresas pertenece al segmento pyme.
Evolución en el tiempo
Por otra parte, también se consultó sobre la evolución del emprendimiento en tres años respecto a distintos factores. En lo referido a “imagen o prestigio social”, más de 60 por ciento considera que su emprendimiento tuvo un crecimiento sostenido, el resto permaneció en la misma situación.
En la evolución en las ventas y el nivel de actividad, 50 por ciento tuvo un crecimiento sostenido, el otro 50 por ciento alternó etapas de crecimiento, estancamiento y decrecimiento. Con respecto a la evolución de las ganancias, según la investigación, 37,5 por ciento tuvo un crecimiento sostenido. El resto, alternó etapas o permaneció en la misma situación.
Para avanzar “la incubadora de córdoba no consiguió promover el proceso de spin off puro”
Las principales opiniones de informantes calificados de la Fundación Incubadora de Empresas (FIDE) concluyen que, actualmente, la incubadora da más prioridad al perfil emprendedor que al proyecto.
En este sentido, también se llegó a la definición de que existe un déficit de iniciativas spin off. Indicaron que son muy pocos los investigadores universitarios, académicos o empresariales que presentan proyectos.
Señalaron además la ausencia de un marco social, educativo, económico y financiero que genere los incentivos para que las ideas sean llevadas a cabo. El déficit es particularmente notorio dentro de las instituciones universitarias.
De todo lo anterior, la investigación concluye que la FIDE aún no ha conseguido promover un proceso de spin off puro.
En este sentido, los investigadores aseguran que “para alcanzar tal mecanismo de transferencia de conocimientos, el rol de la universidad es fundamental”.
“En Córdoba, resta aún recorrer un largo camino para materializar el modelo de universidad innovadora. Sin embargo, la FIDE aún constituye un espacio estratégico en cuanto desarrolla acciones orientadas a fortalecer el espíritu emprendedor en iniciativas de carácter pyme”, concluyó la investigación.
Casos de microemprendimientos gestados en el marco de la FIDE de Córdoba
– Emprendedor: Juan Pablo Aráoz. Producto: pizzas refrigeradas envasadas en atmósfera modificada para canales tradicional y food service / web
– Emprendedor: Allan Rusell-White. Producto: unidad de ataque rápido y patrullaje – cuatriciclo bombero/ web
– Emprendedor: Ariel Gómez Noto. Producto/servicio: automatización y control de sistemas eléctricos en forma remota e inalámbrica / web
– Emprendedores: Flavio Ciciliani, Griselda Vilela Aguirre. Producto: muebles de exterior de alta gama / web