El diseñador industrial cordobés Emiliano Agost vio la dificultad que implica para los odontólogos atender a pacientes en sillas de ruedas. También se percató de que no había en Argentina ningún equipamiento para tratar a esta población, que en el país son unas 900 mil personas -según datos del Indec-. Por esto, decidió desarrollar un equipamiento médico consistente en una plataforma reclinable para atención odontológica a personas con discapacidad motriz. El aparato se llama Inclutec y tiene como propósito llegar, principalmente, al sector público y masivo
Por Natalia Riva – [email protected]
En odontología, atender a pacientes en sillas de ruedas se torna un verdadero desafío cuando no se cuenta con el equipamiento adecuado. La transferencia de muchos pacientes al sillón con o sin asistencia mecánica conlleva un riesgo para la salud para los pacientes y la gran mayoría de odontólogos y seguros no están dispuestos a asumir.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), existen en el país unas 900 mil personas en sillas de ruedas. Por otra parte -en complemento de esta información-, la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que dos tercios de la población portadora de deficiencias no reciben atención bucodental.
“Uno de los problemas que aparecen en las consultas con este tipo de pacientes es que al estar sometidos durante largos períodos de tiempo a hospitalizaciones o a rehabilitaciones y terapias para la mejora de sus capacidades intelectuales, físicas y de comunicación, el aspecto de la salud dental queda relegado a un segundo plano. Esto trae una serie de consecuencias en las consultas odontológicas”, resalta la OMS.
Ingenio cordobés
Emiliano Agost es un diseñador industrial cordobés que se percató de esta situación y de la inexistencia de una herramienta necesaria para atender a esta población. Por esto, decidió desarrollar un equipamiento médico odontológico para personas en sillas de ruedas.
Concretamente, está trabajando en desenvolver y fabricar una plataforma reclinable para atención odontológica a personas que se trasladan en sillas de ruedas y que posean algún tipo de discapacidad tanto motriz como mental.
“Este desarrollo es totalmente novedoso en el país y Latinoamérica, ya que no existe nadie que lo produzca o comercialice y es de suma utilidad para poder otorgar una correcta atención a personas con discapaciodad y así lograr una atención mas inclusiva. Cuenta, además, con el aval y apoyo de la Secretaría de Discapacidad e Inclusión del Ministerio de Salud de la Provincia, el Instituto Odontológico Provincial y la Facultad de Odontología de la UNC, entre otros”, explica a Comercio y Justicia el emprendedor.
Para desarrollar esta plataforma, Agost se basó en un antecedente inglés (también hay otra herramienta similar en Estados Unidos) al que le hizo algunas modificaciones. “Si bien existen en el mundo plataformas que sirven para reclinar sillas de rueda, no se comercializan acá porque tienen un costo muy elevado, entre 20 mil y 30 mil euros, y tanto los consultorios privados como los públicos no están interesados en invertir ese dinero”, asegura Agost, al tiempo que subraya que su intención es que su equipamiento sea fabricado 100% en Argentina para que, verdaderamente, tenga un precio accesible e inclusivo, ya que está orientado al sector público y masivo.
Según cuenta el emprendedor, el funcionamiento es muy sencillo ya que la plataforma está a la altura del suelo y el paciente en silla de ruedas puede ingresar por sus propios medios, no hace falta levantarlo ni moverlo. Luego, con un control remoto se inclina hasta la posición cómoda para el profesional y el paciente.
“El aparato tendrá un costo menor al importado; mi dea es que sea verdaderamente accesible e inclusivo. Además, tiene la ventaja de que se puede plegar y trasladar en cualquier utilitario. Esta característica permite que se pueda llevar a un centro de atención rural, por ejemplo”, ejemplifica.
Prototipo terminado
Inclutec -como se llama esta iniciativa cordobesa- ya cuenta con un prototipo funcional que ha sido probado exitosamente. Su desarrollo fue posible en parte porque el proyecto de Agost fue uno de los seleccionados en el programa Emprende Industria, que llevan adelante las secretarías de Industria y Pymes y de Pyme y Desarrollo Emprendedor, que tienen por objetivo fomentar la creación de empresas industriales innovadoras.
También está siendo apoyado e impulsado por el Vivero Metalúrgico, incubadora de la Cámara de Industriales Metalúrgicos y de Componentes de Córdoba, de la que forma parte.
En este momento, el emprendedor está gestionando la patente del producto. Mientras tanto, se propone empezar a difundirlo para que se sepa que “en Argentina hay alguien que está produciondo este equipamiento para discapacidad e inclusión”, finaliza.
Inclutec, por Agost
Su proyecto fue uno de los seleccionados en el programa Emprende Inndustria, lo que le permitió desarrollar un primer prototipo.
Con la patente en trámite, el objetivo actual del emprendedor es dar a concer el producto “inclusivo”.
Está siendo apoyado e impulsado por el Vivero Metalúrgico, la incubadora de la Cámara de Industriales Metalúrgicos y de Componentes de Córdoba, de la que forma parte.