La Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) presentó hoy su relevamiento trimestral realizado a más de 1.700 titulares de micro, pequeñas y medianas empresas de todo el país con el objetivo de contribuir a un diagnóstico de la situación y las perspectivas del conjunto del sector. Los participantes son en su mayor parte profesionales, Mipymes y Pymes de pequeño tamaño (de 0 hasta 50 empleados) y un menor porcentaje (25%) lo constituyen empresas de más de 100 empleados. El tipo de empresas que predominan son del sector industrial, mientras que las restantes se reparten parejamente entre el comercio y los servicios y, en menor medida, agropecuarias.
Respondieron a las preguntas 1754 micro, pequeños y medianos empresarios y empresarias de los conglomerados más importantes del país. El relevamiento se dividió en tres apartados: a) caracterización de las empresas; b) Evolución trimestral; c) Coyuntura y perspectivas.
El informe señaló que se observa la continuidad de un proceso de recuperación de la actividad aún heterogéneo, con eje en la industria, que se fue ampliando hacia otros rubros con el levantamiento de la mayoría de las restricciones por la pandemia de Covid 19 y la consiguiente vuelta a la presencialidad. “También se expresan expectativas positivas de actividad e inversión para 2022, así como la necesidad de que estos factores se traduzcan en una mayor generación de empleo”, destacaron desde Apyme.
Un dato relevante está vinculado con la mejora en los niveles de actividad de los empresarios consultados. Luego de la apertura de restricciones queda claramente plasmada entre el empresariado que participó del relevamiento. “Un 48,9% mejoró su producción, mientras que un 40,7% se mantuvo igual. Solo cayó un 10,4%“, señalaron en el informe.
De acuerdo al nivel de actividad respecto a 2019, los encuestados consultados afirmaron: “Hay un claro crecimiento de la actividad respecto de la prepandemia. La suba en el consumo disparó la productividad del entra-mado Mipyme reflejado en valores cercanos al 60% de crecimiento respecto del 2019. Del mismo modo, sumado el 22,9 por ciento que mantuvo sus niveles de actividad, totalizan un 80,4% que trabaja en valores iguales o mejores”, indicaron.
“Respecto a las perspectivas de futuro, es decir el primer trimestre del año que viene, los consultados consideraron que los niveles de actividad mejorarán o se mantendrán en el mediano plazo. “Este universo totaliza casi un 90%, siendo un 45,2% quienes ven con optimismo el inicio del año próximo y 43% los que consideran que mantendrán los niveles de actividad”, aseguraron.
Asimismo en relación en términos de inversión, y en comparación con el tercer trimestre del año, las conclusiones son altamente positivas: creció un 4,8% la cantidad de empresarios que tiene decidido invertir en el mediano plazo, totalizando casi un 50% de los consultados.
Otro dato a destacar está vinculado con las preferencias en la modalidad de trabajo. “Se constata el crecimiento sostenido del regreso a las empresas. También hay una leve suba de firmas que mantienen una modalidad mixta y solo 2,5% sostiene el teletrabajo”, mencionaron en dicho informe.
Nuevas fuentes de empleo. Con respecto a la posibilidad de creación de nuevas fuentes de empleo, el relevamiento de Apyme advierte que las proyecciones de crecimiento del empleo en el sector MIPYME no resultan alentadoras. “Solo 33,9% de los empresarios que participaron del relevamiento prevé incorporar personal. Este valor cae 5,2% en comparación con el anterior trimestre”, añadieron.
Consultados sobre si creen necesario que el Estado apoye a las Pymes con programas de asistencia, “un significativo 96,4% de empresarios valora que el Estado sostenga los programas de apoyo al sector. Entre ellos, un 57,1% pudo acceder a alguno de estas herramientas. Un 31,3% accedió a financiamiento; 20,8% obtuvo el Repro; un 15,3% mencionó los beneficios impositivos y 2,1% recibió apoyo para exportar. Otros programas utilizados se refieren mayormente a la capacitación y la transformación tecnológica”, destacaron en el informe.
En el relevamiento prevalecen opiniones a favor de la actual política de precios. “Es clave que el Estado controle eficazmente los precios de los insumos difundidos, manejados por monopolios y oligopolios. Los continuos incrementos afectan transversalmente todas las cadenas de valor, restando competitividad a las Pymes y capacidad de consumo a la población”, sostuvieron. Asimismo se valoran los programas de apoyo estatal, que deben llegar aún al conjunto del sector.
Desde APYME se comunicará a las autoridades nacionales esta problemática, que es propia de un proceso de crecimiento en ciernes, a fin de realizar aportes con información “de primera mano” al enfoque sobre la realidad sectorial. “El Estado escucha a las Pymes, lo cual es un avance fundamental respecto de la etapa precedente”, compararon. No obstante remarcaron en dicho documento que continúa pendiente el debate sobre una más adecuada caracterización y segmentación del “sujeto Pyme”. “Es fundamental que las medidas de apoyo existentes se conviertan en una política de Estado específica, integral y sostenible, en línea con el importante papel de las Pymes en la profundización de un modelo productivo con inclusión social”, agregaron desde Apyme.