Idesa advirtió que el sistema educativo está pensado para una meta a la que pocos llegan y no para el ingreso al mercado laboral. Sugieren currícula que incluya preparación en fábricas y oficinas.
“La mayor parte del sistema educativo está organizado para que los estudiantes alcancen un título universitario. Sin embargo, muy pocos llegan a esa meta, mientras que la mayoría es forzada a ingresar al mercado de trabajo con una muy precaria preparación”, advirtió el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) en su último informe nacional, en el que subraya que menos de 15 % de los jóvenes llega a un título universitario.
“El último dato se desprende de la estadística 2008 de la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación de la Nación”, afirmó a Comercio y Justicia Jorge Colina, economista e investigador del instituto, quien contrastó esta situación con la de países desarrollados, y propone modificar el sistema educativo para que incluya en las currículas prácticas periódicas en lugares de trabajo.
Idesa afirmó que en Argentina “son marginales las ofertas con orientación vocacional y casi nulas las que ofrecen la posibilidad de alternar formación general en la escuela con formación específica en las empresas”.
Por el contrario, una característica distintiva de la educación en países avanzados es la fuerte presencia de las orientaciones vocacionales dentro de la secundaria, es decir aquellas que suministran conocimientos de aplicación directa en determinados tipos de empleos. En general, se entiende que una orientación es vocacional cuando más de 25% de los contenidos curriculares está dirigido a dar formación para el trabajo.
Caso Alemania
“Los casos más exitosos son los que contemplan esquemas ‘duales’, es decir, aquellos que toda o parte de la formación específica es impartida en ámbitos productivos, por personal de la empresa formado y con experiencia directa en las destrezas ocupacionales que se imparten”, reveló.
Por ejemplo, en Alemania, 59% de los alumnos secundarios accede a orientaciones vocacionales y 74% de estos alumnos combina clases en la escuela y en las empresas.
“El desafío es generar condiciones para que los contenidos generales se den en la escuela y los contenidos vocacionales en las empresas, alternando con prácticas periódicas en los lugares de trabajo. Para que esto sea posible, no sólo hay que reformular el sistema educativo. También es imprescindible incentivar a las empresas”, concluyó el informe.
Formación in company
“Simular fábricas en escuelas es dilapidar recursos”El informe de Idesa sostiene que la realidad de aquellos que no acceden a la universidad no va a cambiar aportando equipamiento y docentes para recuperar el modelo de las antiguas escuelas técnicas. “Intentar simular un ámbito productivo dentro de la escuela es un camino que termina en dilapidación de recursos y nuevas frustraciones. El mejor ámbito para formar laboralmente a un joven son las empresas”, agrega.
En este sentido, Colina sostuvo que existen adhesiones desde el sector empresarial tanto a nivel nacional, por algunas declaraciones provenientes de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), así como también de empresas cordobesas a las que se les presentó el informe la semana pasada, en el marco de una jornada sobre la articulación de educación-empleo organizadas por el Grupo Córdoba Mejora.