Sólo la mitad de los asalariados cree que sus líderes son abiertos y honestos con ellos. Y apenas 13% se siente comprometido con su labor. Resultado de un relevamiento privado en 142 países.
“Sólo la mitad de los trabajadores cree que sus líderes son abiertos y honestos con ellos, y una cuarta parte no confía para nada en sus empleadores”. Este dato se desprende de un estudio que acaba de difundir la consultora de recursos humanos Manpower con base en un sondeo en 142 países sobre cómo la confianza de los empleados es la base para crear una marca exitosa que atraiga y retenga el mejor talento en una empresa.
“Un hallazgo que resulta impactante es que en la actualidad sólo 13% de los trabajadores se siente comprometido con su trabajo” sostiene el informe.
Los especialistas en recursos humanos sostienen que la confianza de los colaboradores en el liderazgo de la organización tiene un impacto significativo en su permanencia en ella y en la satisfacción que logran en su trabajo. “Es por eso que cada vez más las compañías enfocan sus estrategias en mejorar su Propuesta de Valor como Empleador (PVE) tanto para colaboradores como para candidatos potenciales”, dice el informe.
Asimismo, Manpower advierte de que si bien se le ha dado mucha importancia al concepto de PVE, aún existe un aspecto crítico subestimado: la confianza. Así, la creación de un ambiente que fomente la confianza deriva en un lugar más positivo y productivo para trabajar. Se trata de un círculo virtuoso que mejora de forma natural la PVE.
Por otro lado, emerge del estudio que alrededor de 30% de las personas afirma que de ninguna manera trabajaría en una compañía con problemas de reputación. Entre aquellos que sí lo harían, los hombres dicen que de hacerlo exigirían un aumento de sueldo de 53%, mientras que las mujeres pedirían 60% más.
Según analizan los especialistas, la reacción de los empleadores ante esta realidad ha sido restringir al máximo la información que pueden compartir los empleados. El mensaje final para éstos es que la empresa no confía en ellos.
“Las compañías suelen imponer políticas restrictivas acerca de cuándo, dónde y qué empleados tienen permiso de comunicarse, a fin de mitigar riesgos”, comentó al respecto Fernando Podestá, director Nacional de Operaciones de ManpowerGroup Argentina. “Sin embargo, con este antiguo modelo de control las organizaciones terminan por desaprovechar su más poderoso activo: el empleado” agregó.
La creación de comunicaciones internas efectivas y programas de compromiso para los empleados son dos de las sugerencias a tener en cuenta.
Caso Netflix
El informe señala que Netflix, la empresa estadounidense de entretenimiento de streaming multimedia bajo demanda por Internet, es un buen ejemplo de empresas que confían en su gente y asume que la gran mayoría de sus trabajadores va a tomar buenas decisiones.
En este sentido, rescatan la acción empresarial de motivar a los empleados para que usen ampliamente sus redes sociales.
“Nuestro mantra esencial para los empleados dice libertad y responsabilidad (en cuanto a comunicaciones externas). osotros realmente animamos a la gente para que actúe con más libertad y más bien la educamos acerca de la responsabilidad que esto implica”, dijo el CEO de Netflix Reed Hastings recientemente.