Por Natalia Isi y Germán San Lorenzo *
Desde 1994, la Central de Deudores del Sistema Financiero del Banco Central (Cendeu) recoge datos acerca de las personas humanas y jurídicas que tienen algún tipo de financiación en el sistema financiero. Hoy, en la era de big data, la explotación de datos se ha convertido en una herramienta fundamental para la toma de decisiones de política económica.
En consecuencia, la explotación de los datos disponibles permite generar información que puede ser utilizada como base para el desarrollo de políticas y acciones tendientes a aumentar el acceso al crédito de la población argentina. En este contexto, el propósito de esta nota consiste en analizar y describir algunas características de los deudores del sistema financiero, con relación a distribución geográfica, género y grupo etario, así como la desagregación por tipo de endeudamiento.
Distribución geográfica
Considerando la totalidad de los tipos de financiamiento disponibles en el sistema financiero, 48% de la población adulta de Argentina tiene algún tipo de crédito en el sistema financiero. A escala provincial, la distribución de los deudores muestra que la mayor proporción está en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), en la que 78% de la población adulta tiene algún crédito. Del lado opuesto, la provincia con la menor proporción de deudores es Santiago del Estero, donde 30% de la población tiene algún financiamiento.
A escala regional, resulta interesante destacar que todas las provincias que conforman la Patagonia poseen una proporción de deudores mayor que el promedio nacional (47%), mientras que todas las que conforman el Noroeste y el Noreste Argentino poseen una proporción menor al promedio.
Género de los deudores
A escala nacional, 44% de las mujeres adultas tiene algún tipo de financiamiento en el sistema financiero, mientras que -en el caso de los hombres- ese porcentaje asciende a 52%.
Realizando el análisis a escala provincial, la mayor proporción de hombres adultos con al menos una deuda en relación con la proporción de mujeres adultas con al menos una deuda se repite a lo largo de todo el país.
Los valores muestran que existe una diferencia entre el endeudamiento de los hombres y las mujeres adultas, cuyas causas podrían estar asociadas, entre otras, con la participación de cada género en el mercado laboral: las mujeres tienen una menor tasa de actividad en el mercado laboral6 (47% vs. 69% de los hombres) y una menor tasa de empleo (42% vs. 64% de los hombres). Por otro lado, de la comparación de ambas series surge que la diferencia entre la tasa de actividad y personas con al menos un financiamiento es más significativa en el caso de los varones (69% vs. 52%) que en el caso de mujeres (47% vs. 44%).
Tipo de endeudamiento
El tipo de endeudamiento que más se observa entre los argentinos es a través de tarjetas de crédito: 30% de la población adulta tiene al menos una asistencia de este tipo. En segundo lugar, 19% de la población adulta tiene al menos un préstamo personal. De esta manera, si se comparan estos porcentajes con la proporción de la población adulta argentina que posee préstamos hipotecarios (0,6%), se aprecia que este último tipo de financiamiento tiene una cobertura significativamente menor. Una observación interesante surge al considerar el género de los deudores: en todos los tipos de financiamiento, existen más deudores hombres que mujeres. Así, para el caso de las tarjetas de crédito bancarias y los préstamos personales, 53% de los deudores es del género masculino. En el caso de las deudas hipotecarias, la diferencia es aún más notoria: 66% de estos créditos se encuentran en cabeza de hombres y sólo 34%, de mujeres.
Edad de los deudores
En lo que respecta a la edad, se observa que la mayor cantidad de deudores nació en 1979, por lo que en la actualidad tiene 38 años. En todas las edades hasta los 60 años, la cantidad de mujeres con algún financiamiento es menor que la cantidad de hombres con algún financiamiento. A partir de los deudores de 61 años, la proporción se invierte, registrándose más mujeres que hombres.
En términos relativos a la pirámide poblacional, la serie muestra dos rangos con alta proporción de deudores, uno en la mitad del ciclo laboral de las personas (entre 38 y 43 años), el cual coincide con la cantidad máxima de deudores en términos absolutos, y el otro rango luego de finalizar la vida laboral (entre 66 y 73 años), que posee en términos absolutos aproximadamente la mitad de deudores con relación al máximo de la serie.
* Economistas para el blog del Banco Central de la República Argentina