A las 19, en la sede de Luz y Fuerza (Jujuy 27) se estrena en la ciudad Industria argentina, una película de Néstor Sánchez Sotelo, con Carlos Portaluppi y Soledad Silveyra, entre otros.
Premiado por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), el film que aborda la realidad de las empresas recuperadas argentinas llegará a Córdoba de la mano de la Unión Obrera Gráfica y El Sindicato Regional Luz y Fuerza, con el apoyo de la CGT Regional Córdoba.
En la provincia, El Diario de Villa María, Comercio y Justicia (caso emblemático sobre el cual se fundamentó la nueva Ley de Quiebras), Gráfica Integral y Flexográfica Integral son ejemplos vivos de un fenómeno que comenzó tras la crisis de 2001 y que hoy presenta experiencias de organización cooperativa exitosas.
– ¿Cómo se inicia el vínculo entre la Unión Obrera Gráfica Cordobesa (UOGC) y la producción de Sánchez Sotelo?
-El vínculo se inicia a través del Dr. Luis Caro, Presidente del Movimiento Nacional de Fábricas Recuperadas, a quien le hemos solicitado colaboración para solucionar varios conflictos donde estaba en juego la fuente de trabajo, brindando sus conocimientos y aportes en forma solidaria y desinteresada. El nos informó sobre la producción e incluso fuimos invitados cuando la película fue proyectada en noviembre del año pasado en Mar del Plata, en ocasión de desarrollarse el Festival de Cine.
– ¿Cuál considera que es la importancia de estrenar la película en Córdoba?
– Para nosotros es muy importante el estreno de esta película en Córdoba, porque somos uno de los sindicatos que en la provincia cuenta con varios talleres recuperados y fundamentalmente porque fuimos pioneros en la aplicación de la reforma de la Ley de Concursos y Quiebras -cuando por primera vez en la historia se tiene en cuenta de verdad a los trabajadores en estos procesos- . En diciembre de 2011, el juez de la quiebra de la ex Impresora Mediterránea resolvió entregar a los compañeros de la Cooperativa de Trabajo Flexográfica Integral la continuidad de la producción, luego de una dura lucha librada por los compañeros y la UOGC durante siete meses.
– ¿Cómo fue el proceso de producción de Industria argentina? ¿Participaron los trabajadores de las cooperativas y recuperadas gráficas?
– “Industria Argentina, la fábrica para los que trabajan” fue producida en el marco del Programa País, dependiente del Incaa, que promueve el trabajo creativo de nuevos talentos y está especialmente relacionado con problemáticas sociales. La película desarrolla una historia que está basada en todas las luchas de los trabajadores en defensa de su dignidad y trabajo, que a partir de los años 2001 y 2002 ocurrieron en una Argentina devastada por el plan neoliberal con niveles tremendos de desocupación, como consecuencia de las privatizaciones y la destrucción de la industria nacional. Desde ese punto de vista, podemos decir que es el fiel reflejo de esos acontecimientos, que dieron lugar al movimiento de fábricas y empresas recuperadas. A Mar del Plata fueron muchos compañeros de esas fábricas y revivieron las situaciones pasadas en sus propias historias, compartiendo con los actores esos emotivos momentos.
Nosotros en Córdoba, viendo los avances de la película, sentimos lo mismo porque desde el cierre del taller hasta la resolución final, cuando los trabajadores lo toman en sus propias manos, atravesamos lo que allí se muestra, con ocupaciones, movilizaciones, resistencia a las decisiones judiciales, a la policía y nos queda la satisfacción de haber ganado por haber luchado, a veces en forma muy dura y sacrificada, pero todos juntos. Porque es ahí donde se ve claramente que las soluciones individuales no existen.
– ¿Cuántas empresas gráficas recuperadas por sus trabajadores existen hoy en Argentina? ¿Cuáles son hoy sus principales desafíos organizacionales y políticos?
– Los datos nos indican que existen aproximadamente 25 cooperativas de trabajo gráficas constituidas en Argentina y algunas otras en formación, lo que significa que integran alrededor de 10 por ciento del total de empresas y fábricas recuperadas existentes en todo el país. El principal desafío que tienen es permanecer produciendo bajo las formas solidarias en un sistema capitalista hostil, que tiene al capital como valor supremo y a la ganancia como fin último de toda las actividades. Luego, también es importante la formación permanente para que la igualdad y la democracia en la toma de decisiones y el funcionamiento sean los principios básicos de la gestión.
Políticamente, falta resolver muchos aspectos, por lo que en nuestra organización pensamos que debe modificarse en parte la legislación sobre cooperativas y contemplar específicamente las fuentes de trabajo recuperadas, estableciendo los derechos previsionales y sociales de quienes las integran.
También es importante su integración con los sectores productivos correspondientes, especialmente los que integran pequeñas empresas, para armonizar su permanencia en un proyecto donde se conjuguen continuidad, desarrollo y mejoras permanente para todos sus integrantes.
Es imprescindible asegurar la continuidad y profundización de las políticas de Estado que apoyan y promueven el trabajo cooperativo, impidiendo la pérdida de fuentes de trabajo y de derechos de los trabajadores.