En los tiempos que corren, las constantes presiones del ámbito laboral, las responsabilidades cotidianas y los anhelos internos que convergen pueden repercutir en el rendimiento profesional.
Por Mario Foriase* – Exclusivo para Comercio y Justicia
El síndrome del bore out (aburrimiento) está muy diseminado en las organizaciones de cualquier rubro, potenciado por la realización de tareas cada vez más mecánicas y la desestimación del esfuerzo y las capacidades particulares.
Frente a este panorama, cada vez son más las empresas que realizan acciones para motivar la creatividad de sus empleados. De esta manera, vemos una multiplicación de grupos de running, campeonatos de fútbol y otro tipo de actividades que ayudan a balancear las vidas laboral y personal.
Muchas de estas ideas son propuestas por las áreas de recursos humanos siguiendo una tendencia y una moda que se replica entre las empresas. Sin dejar de ser efectivas, con el tiempo se corre el riego de que se conviertan en una tarea corporativa más.
Una forma de evitar esta situación es generar espacios ideados por los propios empleados, quienes son los protagonistas, con el objetivo de inspirar y desarrollar sus potencialidades, sus gustos e inquietudes.
Desde hace unos años, internamente decidimos potenciar el rendimiento y la eficiencia de nuestros empleados impulsando diversas actividades de distensión a partir de los múltiples intereses expresados por ellos. Cada uno que reúne a más de cinco personas con un interés común puede armar un grupo.
El área de recursos humanos evalúa su viabilidad y, una vez aprobada, la persona interesada será responsable de llevarla adelante.
Estos grupos son abiertos y cualquier empleado puede sumarse contactando directamente al “capitán” de él. Campeonatos de fútbol, clases de guitarra y de windsurf, grupos de running o festivales de cine son algunas de las propuestas que se presentaron y que continúan de manera activa. Conocer las preferencias de los empleados y brindar la posibilidad de crear esos grupos de interés es una excelente manera de fomentar un clima amigable y fortalecer el compromiso con la empresa.
Esto se traduce en un ganar- ganar (win-win) para el empleado y para la organización. Asimismo, nos permite desarrollar la creatividad, fomentar espacios de pensamiento y de trabajo en equipo. El trabajo es arduo pero el resultado vale la pena.
* Gerente de Recursos Humanos de Baufest.