sábado 18, mayo 2024
El tiempo - Tutiempo.net
sábado 18, mayo 2024

Desarrollo económico: energía vs. demagogia

Por Sergio Torres* -Exclusivo para Comercio y Justicia
ESCUCHAR

Cuando los pueblos no desarrollan la capacidad de reflexionar y pensar su futuro, a la vez que todas sus acciones sólo buscan satisfacer sus necesidades materiales presentes, es probable que se sumerjan en conductas demagógicas extremas que pueden ser aprovechadas por los dirigentes de turno.

Los líderes demagógicos desprecian de manera explícita la planificación estratégica situacional que, como método, debería ser la guía de las políticas públicas a implementar, no sólo para satisfacer las necesidades presentes sino fundamentalmente para generar la sustentabilidad de las medidas que se tomen, sin afectar negativamente a generaciones futuras.

Un ejemplo concreto y sufrido por toda la sociedad argentina y fundamentalmente por los más débiles en la actualidad, lo constituyen las erróneas decisiones en materia energética desarrolladas en los últimos 14 años, cuyo resultado más notorio es la pérdida del autoabastecimiento en materia de petróleo y gas que había logrado el país.

El costo monetario de la importación de petróleo y gas, en términos reales lleva al país no sólo a disponer de menos dólares físicos en las reservas del Banco Central, sino que también eleva el déficit de las cuentas externas, generando desequilibrios macroeconómicos.

Explicaciones racionales
Pero ello no es casual. Casi todas las situaciones materiales que nos toca enfrentar tienen alguna explicación racional.

En este caso no quedan dudas de que el haber jugado de manera irracional con la contención del valor real de las tarifas de servicios públicos del sector energético, haber despreciado la institucionalidad necesaria para que se desarrolle el mercado de energía primaria (petróleo y gas), además del otorgamiento de subsidios regresivos durante décadas a sectores que no tenían necesidad de éstos, nos terminan llevando a una situación insostenible desde el punto de vista tanto fiscal como de las cuentas externas y empujando al país a un desequilibrio macroeconómico de tal magnitud que no tiene otra explicación que el fracaso de las acciones colectivas nuevamente. Esto no es nuevo: desde 1930 estamos enfrentando crecimientos esporádicos y caídas intensas en nuestros niveles de PBI.

Algunas cuestiones estratégicas no pueden dejarse de lado si queremos que Argentina ingrese en una senda de desarrollo sustentable. Una de las causas recurrentes de no lograr un crecimiento sostenido está explicado por los desequilibrios macroeconómicos a los que se enfrenta el país en ciclos que aparecen cada ocho o diez años.

Uno de los sectores en los que nos tenemos que poner de acuerdo y establecer como “política de Estado” es en la definición de la matriz energética para los próximos 30 años que permita el desarrollo sustentable de las futuras generaciones.

Ejes para una discusión abierta
Existen dos ejes que deberían ponerse en consideración para una discusión abierta, pluralista e interdisciplinaria entre los distintos sectores involucrados:

1. Sistema de precios libres para la producción de gas y petróleo, sin restricciones a las exportaciones. YPF, estatal, tiene que liderar en el compromiso del Estado a no tocar los precios y no restringir el destino de la producción. El precio del petróleo es internacional y el de gas, regional, en el cual YPF puede y debe jugar de empresa testigo para evitar alzas especulativas de precios. A su vez, si en el gas natural se deja que las distribuidoras puedan trasladar sus costos de compra a las tarifas finales, se creará un mercado de contratos fuertes que eviten innecesarias oscilaciones de precio, dando estabilidad a las inversiones tanto en los segmentos de producción, como en el de transporte y distribución de gas.

2. Con la revolución (posible) del shale gas, Argentina puede y tiene que convertirse rápidamente en un hub exportador hacia Chile, Uruguay y Brasil, dejar de importar gas de Bolivia (dejándolo sólo como respaldo) y transformar sus plantas importadoras de GNL de Bahía Blanca en plantas exportadoras.

Argentina no puede desaprovechar la oportunidad de los recursos naturales existentes en su territorio. Los distintos gobiernos deben respetar políticas de Estado que estén por encima de los discursos liberales o populistas, que no han servido para realizar una regulación y control inteligente sobre los mercados, implicando la imposibilidad de que el crecimiento circunstancial se convierta en desarrollo sustentable. Y si así no se hiciere, no sólo Dios y la Patria nos lo demandarán. También las futuras generaciones de carne y hueso.

*Licenciado en Economía, miembro de Centro de Estudios en Economía, Sociedad y Tecnología (CEESyT)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Leé también

Más populares

¡Bienvenid@ de nuevo!

Iniciá sesión con tu usuario

Recuperar contraseña

Ingresá tu usuario o email para restablecer tu contraseña.

Are you sure want to unlock this post?
Unlock left : 0
Are you sure want to cancel subscription?