El 10 de febrero del año 1923, un siglo atrás, fallecía en Múnich el ingeniero mecánico, físico y doctor en ciencias de la Universidad de Wurzburgo, Wilhelm C. Röntgen, quien cosechó distinciones académicas y científicas de todo tipo y su nombre ha quedado inscripto como uno de los más grandes para el desarrollo de la medicina universal, de la cual todos actualmente somos recipiendarios.
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