Cinco consejos que le permitirán mejorar la administración del tiempo para la inmediatez de un mundo que quiere todo “ya, ya, ya”.
Por Dale Carnegie *
• Llegar temprano. ¿Quién no resignaría 30 minutos de sueño para obtener 100% de eficacia de sus ocho horas de oficina? En estos 30 minutos podrá atacar su bandeja de entrada sin otras distracciones. Tendrá tiempo para responder cuidadosamente los mensajes que llegaron durante la noche -y limpiar la bandeja de entrada antes de “la embestida” de nuevos mails-.
• Planificar diariamente. La gestión del tiempo puede verse amenazada por las herramientas digitales, pero esa misma tecnología puede ayudar a mantener foco. Planifique el tiempo que le llevará cada una de las cosas que tiene para hacer y agregarlas a una lista.
• Estar presente. Las reuniones pueden parecer momentos para navegar en Internet. ¿El problema? La persona pasará más tiempo después de la reunión poniéndose al día con el contenido de ella que si se hubiera concentrado en ella. Si es posible, apagar el teléfono durante una reunión. Si realmente se necesita estar disponible, colocar el teléfono en vibrador y en el bolsillo.
• Evitar la dilación. Ninguna actividad es más eficiente en ayudar a posponer las cosas que Internet, las redes sociales como Facebook y Twitter. Si sólo necesita tiempo para relajar la cabeza, programar el tiempo libre ayudará a acostumbrarse a 5 ó 10 minutos de descanso.
• Proteger el tiempo. Con demasiada frecuencia, adictos a los teléfonos sienten estar conectados virtualmente con la oficina. Es probable que sea razonable para la mayoría de los colaboradores apagarlo para la cena o al acostar a sus hijos en la cama. Es necesario “desenchufarse” en algún momento del día; esto lo ayudará a ser eficiente en el trabajo. Saber que hay que tener tiempo para la familia y uno mismo esto hará que sea más productivo durante todo el día.
* Consultora de entrenamiento para recursos humanos.