Por Alejandro Domínguez (*)
La bioconstrucción aparece hoy como una alternativa frente al cambio climático, la crisis energética y el acceso a la vivienda.
La promoción de hábitats sustentables y el desarrollo de una vida armónica con el ambiente son algunas de las causas que están fomentando el desarrollo de esta disciplina en Argentina. Se trata de hacer viviendas y edificios con diseños bioclimáticos que disminuyen el consumo de energía, con materiales naturales como madera, tierra y fibras naturales que reducen la contaminación ambiental, y la incorporación de tecnologías para el aprovechamiento energético, como la recuperación del agua de lluvia, tratamiento de residuos y aprovechamiento de la energía solar.
El INTI es desde hace 60 años el brazo tecnológico del Estado y por medio de esta línea de trabajo da los primeros pasos en esta temática, en un contexto de prejuicios, desconocimiento, falta de información técnica confiable e informalidad del sector productivo. Como consecuencia, entre los problemas concretos hay falta de materiales estandarizados, de personal capacitado, de organismos de control instruidos y de marco normativo legal y técnico.
Este es el escenario en el que el programa Tecnologías Sustentables del INTI busca intervenir, indagando en el marco legal nacional y antecedentes normativos técnicos internacionales para colaborar en la gestación de una nueva industria –con su consecuente generación de empleo-, transferencia de tecnología y asistencia a productores locales, impulsando así las economías regionales. El objetivo es aportar sustento técnico y generar políticas públicas de hábitat que incluyan a la bioconstrucción como una opción, y el desarrollo de normas y reglamentaciones técnicas para componentes, elementos y sistemas constructivos.
Con este objetivo se está impulsando el Proyecto SUME, una iniciativa del INTI para la generación de un modelo de gestión en red asociativa de producción del hábitat sustentable, que surge para resolver necesidades concretas y objetivos estratégicos en un proyecto de características innovadoras y de alto impacto territorial que busca impulsar la cadena forestoindustrial y formalizar la bioconstrucción en la zona centro del país.
Concretamente, se construirá de forma conjunta un edificio público funcional con materiales naturales regionales, cuyo desempeño será medido para incorporar información técnica al marco normativo nacional y nutrir el Manual de Bioarquitectura en que Tecnologías Sustentables está trabajando junto al Colegio de Arquitectos de la Provincia de Córdoba y profesionales locales. Este módulo, instalado en el centro de la ciudad de Córdoba, contempla un salón de capacitaciones y exposiciones; un comedor para los trabajadores del INTI; y un espacio demostrativo y pedagógico que visibilice tecnologías a alumnos de escuelas técnicas y universidades así como a profesionales y visitantes en general.
Si bien existen diversos marcos normativos, avances tecnológicos y capacitaciones en torno a las construcciones naturales, éste es un paso más de los que aún quedan por dar en el camino hacia el reconocimiento institucional de una nueva concepción integral del hábitat.
(*) Integrante del Programa de Tecnologías Sustentables del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI)