“La tendencia en la forma de ver televisión apunta a la convergencia de tecnología y a la flexibilidad de los contenidos. La nueva experiencia del usuario estará centrada en que el televidente vea lo que quiera, cuando quiera y donde quiera”.
Estas fueron algunas de las conclusiones trazadas por Roberto Muñoz, gerente de ventas del área Home & Networks Mobility para América Latina de Motorola, en el marco de las Jornadas de la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC).
En comparación con la TV analógica, la evolución digital otorga el comando total de la programación a los televidentes, satisfaciendo sus principales demandas. Según Muñoz, la tecnología digital permite aprovechar mejor el ancho de banda y entregar una mayor cantidad de canales al usuario, a la vez que posibilita la transmisión de imágenes de alta definición (HDTV), lo que supone una experiencia superadora. A la vez, la TV digital brinda una guía de programación, indispensable al contar con una amplia grilla de canales.
La interacción se transforma en algo real con la TV digital, ya que posibilita ver Video bajo Demanda (VoD), elección de programas en un almacén de contenidos y contar con un grabador personal (DVR) para pausar, adelantar o retroceder los contenidos, incluso en vivo. Estos avances esbozan un nuevo concepto: la televisión 2.0, donde la interactividad con los usuarios jugará un papel primordial.
La TV digital interactiva significa una ventaja para los cableoperadores. Las funcionalidades de interactividad, como el VoD, representan una nueva fuente de ingresos, así como una manera de conocer los gustos del usuario para mejorar del servicio. Sirve también para diferenciarse de los competidores y lograr la fidelización de los usuarios de alto consumo.