La Justicia dio por cumplido el acuerdo con los acreedores y levantó la inhibición general de bienes que pesaba sobre la compañía.
La Justicia Comercial argentina dio ayer por concluido el concurso preventivo de Aerolíneas Argentinas (AA), abierto en 2001, cuando era propiedad de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), de España. El magistrado a cargo dio por cumplido el acuerdo con los acreedores y levantó la inhibición general de bienes que pesaba sobre la compañía.
En marzo pasado, cuando solicitó a la Justicia el levantamiento del concurso, Aerolíneas, administrada por el Estado argentino desde 2008, anticipó que una medida en este sentido supondría la regularización de la situación económico-financiera de la empresa, la mejora de su calificación crediticia y comercial y el levantamiento de restricciones a la libre administración de los bienes.
“Ésta es una excelente noticia que implica, entre otros aspectos, disponer libremente de nuestros bienes, así como también un gran logro que llega en el momento indicado para continuar el plan de recuperación y saneamiento de la compañía”, aseguró Mariano Recalde, presidente de AA.
“Salir de esta inhibición nos deja mejor posicionados para ingresar a la alianza aerocomercial Skyteam y poder acceder a créditos”, agregó Recalde. AA había fundado su solicitud en el hecho de que “la compañía ha cumplido con las obligaciones emergentes del acuerdo preventivo homologado en 2002 por la Justicia Comercial y que alcanzara un pasivo verificado de 477.378.365,74 pesos” (114 millones de dólares).
Según una certificación contable de la Auditoría General de la Nación, AA ha cancelado 99,31% de los pasivos verificados en el concurso preventivo. La operación de Aerolíneas pasó en 2000 a la SEPI y en octubre de 2001 al grupo privado español Marsans.
En febrero de 2009, el Estado argentino inició un juicio a Marsans para expropiar la línea aérea de bandera, que desde mediados de 2008 es gestionada por el Gobierno.