Según un estudio de tendencias realizado por la agencia de comunicación y estrategia, Conforti/dm´s junto con la consultora mejicana De la Riva Group, el consumidor de hoy es atraído principalmente por tres grandes elementos: lo que da contención, lo que permite catarsis y lo que ofrece paz y tranquilidad.
“El consumidor actual necesita y se apega a estos tres coneptos porque se encuentra en un estado de incertidumbre, confundido, sin saber cómo reaccionar ante su entorno inmediato e inmerso en un mercado cada vez más competitivo, un futuro incierto y exigencias cada vez mayores” explicó Darío Conforti, director de la firma.
La incertidumbre hace que los clientes se aferren a mensajes que transmitan protección y seguridad en su búsqueda de afecto, pertenencia y reconocimiento.
Buscan también catarsis, como fuga del estrés, algo que les permita descargar tensiones y emociones negativas e incluso el aburrimiento. Esto explica la repercusión de acciones masivas y populares como eventos, conciertos, fiestas y competencias deportivas.
Además, ante un entorno amenazante que afecta la integridad física y mental de la sociedad del presente, se buscan aquellos elementos que les permitan sentirse seguros y en armonía. Para algunos, estos factores se relacionan con la búsqueda de la naturaleza, la espiritualidad y/o actividades relacionadas con el yoga, los spas, el feng shui, etc.
-¿Qué necesitan los consumidores y qué los inspira?
-Los consumidores necesitan motivación, una inyección de energía positiva, de protección, de seguridad y de elevar su autoestima. Las marcas se transforman en el vehículo para conseguir lo que los clientes necesitan.
Para ello, hay que ser percibido como un líder para lograr el respeto y credibilidad de los usuarios. Además, hay que ser transparentes y honestos a través de productos y servicios de calidad que brinden seguridad al consumidor, quienes deben sentirse orgullosos de la marca que persiguen.
“Una marca es inspiradora cuando construye un territorio propio, cuando es única y original desde su filosofía, misión y visión”, destacó Conforti.
“Es necesario ser valientes e intensos, atreverse a innovar para sorprender y entregar a los consumidores un beneficio sublime que les permita sentirse protegidos y potencie su autoestima” agregó.
En mercados cada día más complejos, la buena imagen y reputación son sinónimos de excelentes resultados. El prestigio de las empresas es la regla que mide su actuación en el mercado y las posibilidades de ganar la elección que hace a cotidiano la gente.