ESCUCHARLa nueva comisión directiva de la Cámara de Corredores Inmobiliarios de Córdoba gestiona ante el Ministerio de Industria una propuesta de líneas blandas para activar el mercado de “usados”.
El hijo de quien fundó la Cámara de Corredores Inmobiliarios de Córdoba (Cacic) hace 27 años es ahora el presidente de la entidad, tras la renovación de autoridades que se concretó semanas atrás.
Se trata de Alejandro García Sagués (H), quien adelantó que -entre los ejes de su función- la petición de créditos blandos será uno de los principales.
El directivo cumplirá sus funciones como titular por el término de dos años, junto a José Diehl -vicepresidente primero-, Andrés Rojo -vicepresidente segundo-, Carolina Caffarati -secretaria- y Martín Dahan -tesorero-.
Sobre la base de su trayectoria institucional, García Sagués graficó que su función será la de coordinar una entidad que representa a un sector “muy importante” en la provincia y que, dada la coyuntura económica, requiere de un “mayor esfuerzo”.
“Continuaremos representando los intereses de todo los inmobiliarios, que en estos momentos de complicación económica están candentes”, dijo a Comercio y Justicia el directivo.
En ese sentido, indicó que se activan las relaciones con el Ministerio de Industria provincial para que, por medio del Banco de Córdoba, considere el armado de “créditos hipotecarios blandos”, los que permitirían mover el mercado de usados. Concretamente, ya se reunieron con directivos de la Secretaría de Industria, quienes -junto al ministro Martín Llaryora- “mostraron receptividad” .
Si bien aclaró que la necesidad del crédito no es sólo para reactivar un sector sino que es una emergencia social, reparó en que la “mayor accesibilidad” derramaría en un caudal operaciones inmobiliarias, que “son mucho más amplias que las de desarrollistas, para quienes lanzaron los anteriores” (las líneas de créditos “Mi Casa” para la construcción presentadas años atrás por el mismo banco).
Tras la pregunta de cómo debería ser un crédito “accesible”, García Sagués respondió: “Como eran antes, cuando sólo se tenía en cuenta el valor real del inmueble según la tasación y no, por caso, la antigüedad de la vivienda”. Recordó que el mercado del inmueble usado está parado, y que solo se moviliza con relación a las “oportunidades”.
Una prueba de la falta de préstamos y de la necesidad habitacional es la sobredemanda de alquileres de casas, por la que los valores son en algunos casos “muy altos”. “Hay listas de espera de viviendas en alquiler en la zona norte de Córdoba; si una familia quisiera comprar una casa en Poeta Lugones por ejemplo, podría hacer una entrega y pagar la cuota de un crédito en lugar de un alquiler”, ejemplificó.
Hacia fuera
Como parte de la gestión institucional, la cámara tiene en su plan reforzar la relación con las demás entidades institucionales del sector, a los fines de aunar intereses comunes y elaborar soluciones en conjunto. Con el mismo criterio, el objetivo será apuntalar los vínculos con los gobiernos municipales y provinciales, para plantear, a una sola voz, sus problemáticas que en tiempos de crisis, cobran mayor relevancia.
Hizo mención a la participación de Cacic en el Foro Privado de la Construcción, un espacio del que participan diez entidades vinculadas al rubro y que fue presentado semanas atrás en la sede de la Cámara de Desarrollistas Urbanos de Córdoba (Ceduc). En la misma línea, continuará sosteniendo su sinergia con al Cámara de Comercio de Córdoba y otras entidades diversas, como Iplan.
Puertas adentro, el objetivo es mejorar la comunicación interna y perfeccionar el enlace con los socios, que a lo largo de la provincia son más de 200.
