A partir de una apuesta realizada por el Grupo Libson, tras ocho meses de estar cerrada, la fábrica de heladeras y freezers Neba reabrió sus puertas bajo el nombre de Nueva Neba.
Con una inversión estimada de $185 millones prevista para los próximos dos años, la fábrica ubicada en El Pantanillo (Catamarca) se puso en marcha el lunes pasado con una producción inicial de 45 mil unidades anuales entre heladeras y freezers.
Los productos se comercializarán principalmente en tiendas de electrodomésticos y cadenas de retail de todo el país. Para abrir la fábrica, la empresa mantuvo las fuentes de trabajo del ciento por ciento de los empleados y apunta a duplicar la plantilla en los primeros meses, con el objetivo principal de potenciar la producción, para alcanzar 85.000 unidades anuales en 2021.
“Priorizando la industria nacional y con precios accesibles, lanzaremos nuevos modelos apostando a la innovación, la calidad, el diseño y el bajo consumo. En esta nueva etapa, nos propusimos, además, reestablecer la relación con todos los canales del mercado, así como preservar los puestos de trabajo y crecer rápidamente como parte fundamental para el desarrollo de Nueva Neba”, comentó Cristian Alfaro, director comercial de la empresa.
Se estima que la producción anual de heladeras en Argentina ronda las 950 mil unidades y 200 mil la de freezers. El recambio de estos productos suele darse cada diez años aproximadamente y 40% del mercado corresponde al segmento de entrada con precios de entre $25.000 y $38.000 (PVP).
“Desde el Grupo Libson decidimos apostar en Nueva Neba ya que confiamos en el valor de la marca y más aún en los atributos de sus productos que se basan en la durabilidad y el alcance para toda la familia. Estamos convencidos de que lograremos, rápidamente, poner a trabajar la planta, a su máxima capacidad productiva”, aseguró Alfaro.
Libson Group es un grupo de capitales 100% argentinos con una vasta trayectoria en el sector industrial desde 1969.