Para el tribunal, el demandante demostró los padecimientos sufridos, que afectaron su dignidad, tras ser desnudado y filmado por un jerárquico. La empresa también debe responder
Al quedar acreditado el acoso laboral sufrido por el demandante en su puesto de trabajo que le propinó un supervisor, si bien desestimó la incapacidad psiquiátrica reclamada con sustento en la Ley de Riesgo Trabajo (LRT) por no detectar la perita una patología relacionada con los eventos dañosos, la Sala 11ª de la Cámara del Trabajo de Córdoba sí hizo lugar al daño moral solicitado por el damnificado y condenó tanto al jerárquico -a título personal- como a la empleadora.
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