Un hombre procesado por llevar drogas dentro de su cuerpo fue sobreseído por la Sala I de la Cámara Federal porteña. En primera instancia se dispuso la imputación del sujeto, pero la defensa solicitó su nulidad aduciendo que se vulneró el secreto profesional y que el interés represivo del Estado debe ceder ante el derecho a la vida. El a quo aceptó el planteo, que fue ratificado, pero la Cámara Nacional de Casación Penal revocó ambos fallos y dispuso continuar con la investigación.
Sin embargo, en abril, en autos “Baldivieso”, la Corte Suprema sobreseyó a una persona que hacia de “mula”, quien fue denunciada por los médicos que lo trataron, al considerar que es “inmoral” someter a alguien al “inhumano dilema” de “la muerte o la cárcel”. Así, invocando ese antecedente, que varió la posición que hasta el momento se había mantenido con respecto a los procedimientos iniciados tras denuncias de galenos, la Cámara declaró nula la denuncia que originó la causa y sobreseyó al encartado, enfatizando la necesidad de preservar la vida por sobre “un ansia de persecución punitiva”.