La Cámara de Diputados de la provincia de Santa Fe convirtió en ley el proyecto que establece la adhesión a la normativa Nacional de Tránsito, que incorpora el carnet para conducir por puntos.
Asimismo, se le otorgan más facultades a la Agencia provincial de Seguridad Vial y se promueve conformar el Consejo Provincial.
La legislación también prevé que la negativa de los particulares a realizarse pruebas de alcoholemia constituye una conducta ilícita autónoma y reconoce a municipios y comunas como autoridad de aplicación y comprobación de tránsito. Además, la ley modifica la distribución del producido por multas por infracciones, privilegiando a los distritos locales.