Pérdida de confianza por apropiarse de mercancía

El tribunal confirmó con la prueba colectada las maniobras fraudulentas realizadas por quien tenía la función de controlar la devolución semanal de los diarios y revistas que comercializa la demandada. [privado] Tras confirmar con la testimonial rendida la trama pergeñada por un ex empleado de Revicor SA, para apoderarse ilegítimamente de mercaderías que eran de propiedad de la demandada, la Sala 1ª de la Cámara del Trabajo de Córdoba confirmó la legitimidad del despido por pérdida de confianza dispuesto por la firma dedicada a la venta por mayor de diarios y revistas, al considerar que, además de causarle un perjuicio material, afectó la buena fe y fidelidad que debe existir en todo contrato de trabajo. El quiebre de la relación laboral ocurrió por la denuncia de la demandada al detectar la falta, de modo periódico sistemático y reiterado, de mercadería que debiera ser controlada y recibido por el actor, César Daniel Pedraza, cuando se producen las devoluciones de títulos semanalmente, siendo que la función específica dentro de la compañía era la del control y recepción de esos títulos devuelto por los distintos clientes de Revicor, lo cual originó la pérdida de confianza, todo lo cual fue negado por el accionante produciéndose el debate en el pleito. El tribunal integrado por Víctor Hugo Buté, luego de analizar las testimonial rendidas señaló que “las expresiones concordantes vertidas por los testimonios recibidos –que no impugnados en el debate-, dan cuenta acabadamente de la participación que le cupo a Pedraza en la maniobra urdida, afectando claramente los intereses económicos de la principal”. Argumento Bajo esa premisa fáctica sostuvo el vocal que “el contrato laboral no atañe solo a aspectos económicos de la relación, sino que está vinculado también con cimentar las interrelaciones humanas, por ello las partes deben siempre ajustarse recíprocamente a pautas o normas de conductas que logren priorizar el obrar con buena fe y fidelidad”. En ese sentido el magistrado precisó que “cuando ello no ocurre de este modo, es al Juzgador a quien le compete valorar con mesura y prudencia si la entidad de la falta endilgada resulta suficiente para desplazar el principio de perdurabilidad contractual que consagra el artículo 10 del Régimen de Contrato de Trabajo”. En consecuencia, el juez precisó: “Ninguna duda albergo al sostener que lo verificado en estos actuados justificó plenamente la pérdida de confianza” invocada por la firma accionada para disolver el vínculo”. Por ello, en el fallo se resolvió rechazar “la Indemnización por Antigüedad y por omisión del Preaviso, como así también el artículo 2 de la ley 25.345”. Autos: “PEDRAZA, CESAR DANIEL C/ REVICOR S.A. - ORDINARIO - DESPIDO - EXPTE. Nº 120543/37”

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