Otorgan tutela de una nieta a la abuela, luego de que sus padres delegaron esa responsabilidad

Los progenitores, quienes tienen otros dos niños, le habían entregado a la solicitante el cuidado de la menor desde que ésta tenía un mes de vida, para ayudarla a raíz del cuadro depresivo que sufría tras quedar viuda

El Juzgado de Primera Instancia de Familia de Quinta Nominación de Córdoba aceptó la solicitud de tutela presentada por la abuela materna en relación con su nieta. La peticionante ha ejercido la responsabilidad parental de la niña desde el año 2017, tras recibir la delegación de los progenitores.

Para tomar esta decisión, se llevó a cabo una audiencia en la que se escuchó directamente a la niña y se tuvo en cuenta también la opinión del equipo técnico (Catemu), ya que esto respetaba mejor el interés superior de la niña.

La abuela argumentó que, a pesar de que los padres de la niña están vivos, la nieta ha convivido con ella desde que tenía un mes de vida, habiendo la solicitante asumido exclusivamente sus cuidados y crianza debido a la incapacidad de los progenitores para hacerse cargo de ella.

Su solicitud se basó en la necesidad de poder representar a la nieta en todas las gestiones necesarias para garantizar sus derechos a la salud, educación y beneficios sociales. Los progenitores aceptaron la demanda y estuvieron de acuerdo con la solicitud de tutela.

Institución

La titular del juzgado, Susana María Squizzato, al analizar el caso, señaló que la tutela es una institución destinada a proteger a un niño o adolescente que no haya alcanzado la plenitud de su capacidad civil y que no cuente con una persona que pueda ejercer la responsabilidad parental.

Además, se mencionó que el tribunal que homologó la delegación de la responsabilidad parental a un pariente, en este caso la abuela materna, puede otorgar las funciones de protección de la persona y bienes de los niños a quienes se les haya delegado su ejercicio.

La magistrada analizó que, según lo manifestado por las partes y los informes del equipo técnico Catemu, la abuela materna ha cuidado y criado a la niña de manera exclusiva desde que enviudó en junio de 2015.

Añadió que la abuela y la nieta viven juntas en una vivienda de propiedad de la primera y forman una familia monoparental femenina, compuesta por dos generaciones intermedias, y que el sustento económico de la familia proviene de las pensiones de la abuela y del programa Potenciar Trabajo.

El tribunal consideró que la vida cotidiana de la familia gira en torno a la educación y el cuidado de la niña, y que la abuela ha logrado coordinar sus horarios laborales en función de ello.

En el caso, el trámite de tutela se inició para garantizar los medios necesarios para continuar ejerciendo la crianza y el cuidado de la infante, una responsabilidad que la abuela ha llevado a cabo desde el nacimiento de ésta.

Durante la entrevista, la niña se expresó de manera clara y espontánea, describiendo su vida cotidiana y su papel en la estructura familiar. Además, mantiene contacto diario con sus hermanos, quienes asisten a la misma escuela.

Historial

En cuanto a la historia vital de la niña, la jueza señaló que ella tiene conocimiento de sus lazos de filiación y de los acuerdos familiares relacionados con su integración en el hogar de la abuela materna.

Por lo tanto, la jueza concluyó que correspondía admitir la demanda y otorgar la tutela de la niña a la abuela materna, ya que esto respeta mejor el interés superior de la niña, y la decisión también garantiza la continuidad de su entorno familiar, que abarca aspectos locativos, temporales y de legitimidad.

Para Squizatto, la tutela busca validar una situación que ha perdurado durante muchos años, prácticamente desde el nacimiento de la niña, y prioriza el principio de estabilidad.

En resumen, consideró que, con el fin de garantizar la representación legal y el disfrute de los derechos de la niña, es apropiado designar a la solicitante como tutora de N. N. M. -hija de M. A. M. H. y de H. D. M.-, quien deberá aceptar el cargo con las formalidades y obligaciones legales en una audiencia y proporcionar información al tribunal sobre la existencia de bienes y beneficios de los que la tutelada sea titular.