El Juzgado de Niñez, Adolescencia, Violencia Familiar y de Género de 7ª Nominación de Córdoba ordenó que se le coloque una tobillera electrónica (dispositivo dual) a un hombre que recuperó la libertad luego de estar detenido por agredir a su ex pareja.
La medida -que en principio regirá durante cuatro meses- se adoptó porque el sujeto incurrió en reiterados incumplimientos de la prohibición de acercamiento al domicilio de la denunciante a pesar del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
La magistrada Susana Ottogalli de Aicardi basó su decisión en un informe remitido por la Secretaría de Lucha contra la Violencia de Género y Familiar, del cual surge la extrema situación de vulnerabilidad a la que estaba expuesta la mujer, debido a que aún durante la cuarentena el agresor violó la restricción de contacto vigente.
Por esa razón, los profesionales del organismo consideraron que el botón antipánico (dispositivo SALVA) no es suficiente resguardo.
En definitiva, el informe concluye que la damnificada corría alto riesgo de femicidio.
Ottogalli de Aicardi también valoró la nueva denuncia formulada por la víctima, de la que surge que el agresor transitaba por el frente de su domicilio o por zonas cercanas.