El juez interinamente a cargo del Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas Número 25 de la Ciudad de Buenos Aires, Norberto Tavosnanska, dictó la prisión preventiva, para E.L., investigado por presunto grooming.
La medida regirá hasta el 12 de junio (90 días hábiles).
Al reclamar el encarcelamiento cautelar, la fiscalía indicó que el 26 de enero el encausado intentó abusar del menor T.V., de 11 años, y que para convencerlo de mantener un encuentro sexual lo contactó y le envió mensajes a través de la red social Instagram durante la semana previa.
En esa línea, el agente advirtió que la magnitud de la pena podría no ser de ejecución condicional y estimó que se probó la comisión del delito de grooming.
Por su parte, la asesora tutelar adhirió a lo manifestado por el representante del Ministerio Público Fiscal y valoró que “hay elementos de autoría”. También argumentó que el encartado podría entorpecer el proceso o fugarse.
A su vez, alertó que se podría estar en presencia de ilícitos conexos con otras víctimas.
El magistrado explicó que no hay duda alguna acerca de que existieron diálogos con contenido sexual entre el imputado y el preadolescente. Destacó además la insistencia del primero, quien, según precisó, “en todo momento” le insistió al menor con que sus padres no debían enterarse en ningún momento de lo que estaba ocurriendo. “Estamos en el inicio de la pesquisa”, enfatizó el magistrado. En esa línea, aclaró que resta analizar la actividad de E.L. en otras redes sociales.
Tavosnanska resaltó en su decisorio que el encausado concurrió al domicilio allanado con preservativos, dinero, una jeringa y un frasco de Estanozolol 10 miligramos inyectable, un esteroide que además de su efecto anabólico aumenta el impulso sexual en los adultos y ayuda al desarrollo sexual precoz en los varones, y aclaró que no desistió voluntariamente porque el delito no fue consumado por la presencia de terceras personas.
E.L., un personal trainer de 23 años, quedó detenido la semana pasada. Conoció a T.V. en un gimnasio.
El joven comenzó a seguir al nene en Instagram y le envió varios mensajes que fueron subiendo en tono hasta llegar al pedido de concretar un encuentro.
El padrastro de T.V. detectó lo que sucedía, se hizo pasar por él, aceptó una “cita” y logró que la Policía Metropolitana detuviera al entrenador in fraganti cuando se apersonó en el domicilio del nene,
La causa es investigada por la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas Número 35, a cargo de Celsa Ramírez.
La agente reclamó la preventiva y actualmente intenta determinar si se trató de un caso aislado o si el hombre usaba el gimnasio como excusa para conocer niños y “seducirlos”.