Con el objetivo de coordinar fuerzas para resolver el flagelo del narcotráfico, los fiscales federales de Córdoba se reunieron ayer con fuerzas operativas de seguridad que actúan en la provincia, en un intento por impulsar un organismo que permita coordinar datos que posibiliten la prevención y represión de este delito.
La reunión fue convocada por el fiscal federal Nº 2 de Córdoba, Gustavo Vidal Lascano, tras la alarma que despertó en los tribunales cordobeses el hallazgo de casi mil kilos de cocaína que fueron descubiertos en España y que habían sido llevados desde Córdoba.
Además de Vidal Lascano, participaron del encuentro los fiscales federales Enrique Senestrari y Graciela López de Filoñuk; el jefe de la Policía de Córdoba, Alejo Paredes; el jefe de la Dirección Regional Aduanera, Raúl Bustos Cora; el jefe de la delegación Córdoba de la Policía Federal Argentina, comisario Daniel Saldivar; el jefe delegación Córdoba de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, comandante Martín Bruno, y el subcomisario Ekel González, de la Policía Federal.
La reunión culminó con la promesa de las diferentes fuerzas de seguridad de volverse a encontrar en 15 días, ya sin la presencia de los fiscales, para elaborar en conjunto un plan de acción que les permita trabajar de manera mancomunada, compartiendo información vital para prevenir el delito de la droga en la provincia.
En declaraciones a la prensa, Vidal Lascano remarcó que se pretende contar con una base de datos que permita dilucidar cuál es “el modus operandi” de las bandas dedicadas al narcotráfico, aunque aclaró que la intención de la convocatoria no fue “instruir” ni “dar directivas” a los uniformados.
Al encuentro no fue invitado el secretario de Prevención y Lucha contra el Narcotráfico de Córdoba, Sebastián García Díaz, puesto que se trató de una reunión “meramente operativa”, según expresó el propio Vidal Lascano.
Disparador
La invitación de los fiscales a las fuerzas de seguridad surgió tras la operación conocida como "Ciclón", en la que se desbarató una banda de narcos que traficaba cocaína desde la Argentina hacia España. La investigación puso al descubierto que el cargamento de droga, previo a su venta, fue acumulado, guardado y acondicionado en la provincia de Córdoba. Por el hecho se detuvo en aquel país a 11 personas entre argentinos, peruanos, españoles y serbios.