La Cámara Federal resolvió sobreseer a la mayoría de los acusados de evadir impuestos. Entre los beneficiados está el empresario cerealero Atilio Mengo.
Por la ley de blanqueo de capitales, la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba sobreseyó en los últimos días a la mayoría de los acusados por una causa de evasión impositiva que tuvo un fuerte impacto en la ciudad de Río Cuarto hace siete años.
La semana pasada, la Cámara Federal resolvió absolver al empresario Atilio Mengo, de Río Tercero, quien estaba acusado de ser un eslabón esencial en la cadena de la evasión al utilizar sus empresas FLG y Soybeans para comprar cereales a monotributistas quienes, en realidad, eran indigentes que habían sido inscriptos como productores rurales. Esos supuestos pequeños productores no pagaban IVA ni Ganancias.
La Cámara Federal de Córdoba entendió que Mengo, quien actualmente dejó de comercializar cereales pero tiene una fábrica de silos, y sus dos hijas, Francina y Luisina, debían quedar sobreseídos por la amnistía que significó el blanqueo de capitales para quienes tenían causas penales de evasión fiscal sin sentencia firme.
Con el sobreseimiento de Mengo sólo quedan dos procesados de los 19 que tenía la causa. Uno de ellos es María Pía Cardoso, abogada riocuartense que en algún momento fue considerada cabecilla de la banda que estaba acusada de reclutar a indigentes para evadir impuestos del campo. Sin embargo, ella también puede quedar desvinculada de toda persecución penal.
Cuando estas resoluciones queden firmes se desactivará la elevación a juicio que a mediados de septiembre decidió el juez de Río Cuarto Carlos Ochoa.
Cabe recordar que el polémico blanqueo que aprobó el Gobierno nacional en 2009 permitió que se extinguieran las causas penales para quienes se sumaban a los beneficios de esa ley, siempre y cuando los delitos se hubieran cometido hasta el 31 de diciembre de 2007.