El bloque de diputados del Frente Para la Victoria consiguió emitir dictamen ayer al proyecto del Código Procesal Penal en un plenario de comisiones.
De ese modo, buscará convertirlo en ley en una sesión especial que se realizará la semana próxima en el recinto. El debate tuvo cuestionamientos de la oposición, aunque hubo un fuerte consenso para cambiar el paradigma del sistema inquisitivo a uno acusatorio.
La jornada se abrió antes del mediodía. Acompañado por el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación Julián Domínguez, el ministro de Justicia y Derechos Humano Julio Alak se presentó en la Cámara Baja a defender la reforma del Código Procesal Penal y dijo que “es un gran honor exponer sobre los lineamientos principales de una reforma que cambiará la vida de los ciudadanos”. En ese punto, celebró “que esta transformación pone el énfasis en una nueva comprensión del delito, sobre todo del crimen organizado. El objetivo es hacer más eficiente la lucha contra el delito”. Enfatizó que es una deuda histórica del Estado “cambiar la ineficacia del Código Penal con el sistema inquisitivo a cargo de la investigación de un juez, que fue cuestionado desde el nacimiento de la República” y aclaró que “no es ninguna novedad el planteo de pasar de un sistema inquisitivo a uno acusatorio”.
En una exposición que duró cerca de veinte minutos, Alak indicó que este tipo de procedimiento penal, “más allá de las críticas, transitó toda la historia de la República y fue impermeable a la Constitución de 1853”, aunque las provincias se adelantaron al derogarlo.
También advirtió de que “si no se modifica el procedimiento penal, no podemos cambiar el derecho. Debemos escuchar a una sociedad que reclama justicia con celeridad, que reclama que haya menos procesados y más condenados, y más protección a las víctimas. Tenemos 60 por ciento de procesados en las cárceles, es decir, estamos duplicando la media normal, lo que significa que no sabemos si son inocentes o culpable. Y los juicios duran entre 6 y 8 años.
Necesitamos una decisión política para conseguir mayor transparencia, rapidez y cumplimiento de los derechos y las garantías”.
En el Anexo C de la Cámara, la diputada Patricia Bullrich (Unión Pro), no convocó a sus diputados. La legisladora realizó una “impugnación metodológica” porque, según ella, la reunión debería ser conducida por su comisión, donde “hay ocho proyectos de creación de un nuevo Código Procesal Penal y 400 proyectos de modificación del mismo, mientras que en Justicia no hay ninguno”.
En respuesta a Bullrich, la Secretaría Parlamentaria de la Cámara de Diputados argumentó que “ello tiene más que ver con la organización del Poder Judicial y del Ministerio Público, y no sólo con una norma de contenido procesal penal”, porque se cambia el sistema inquisitivo por uno acusatorio. De esa forma, el debate fue conducido por la comisión de Justicia, coordinada por Graciela Giannettasio. Desde la oposición no pusieron trabas al cambio del sistema inquisitorio al acusatorio, aunque señalaron ciertos reparos. El diputado radical Manuel Garrido dijo que “es un refrito de otros proyectos aprobados en América Latina, con correcciones”.