Remax y una de sus franquicias fueron condenadas por a indemnizar al potencial adquirente, quien había señado el inmueble y no pudo concretar la operación porque el vendedor estaba inhabilitado
La Sala M de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil confirmó la responsabilidad de la firma Remax por los daños y perjuicios generados como consecuencia de la frustración del contrato de compraventa de un inmueble.
Apoyá el periodismo especializado e independiente
Este contenido es exclusivo para suscriptores.
Iniciá sesión si sos suscriptor/a