El gobierno de México y el sector privado llegaron a un acuerdo sobre la prohibición de la subcontratación de personal (outsourcing), que sólo se permitirá para servicios especializados.
En el resto de casos, las empresas tendrán un trimestre para integrar a los empleados a sus nómina.
Hace cuatro meses, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó una iniciativa para reformar ese esquema laboral, que definió como abusivo. Los empresarios advirtieron entonces de la incidencia negativa de la medida en plena crisis por la pandemia y comenzaron negociaciones.
Ahora, casi intacta, la propuesta del mandatario llegó al Congreso.