EEUU: el Tribunal Constitucional respaldó una normativa migratoria de Donald Trump

La justicia de EEUU revivió el programa “Quédate en México”, instaurado por la administración del republicano Donald Trump.

Un fallo del Tribunal Constitucional obliga a la Casa Blanca a implementar el mecanismo que ordena esperar en México a los solicitantes de asilo, medida que significa un revés judicial para el presidente Joe Biden.

“Quédate en México”

El tribunal habilitó el reclamo de un juez de Texas, quien pidió reinstaurar el polémico programa “Quédate en México” ideado por Trump.

El mecanismo fue uno de los primeros blancos que derribó la administración demócrata al llegar al poder, permitiendo que más de 10 mil personas siguieran sus trámites migratorios en territorio estadounidense.

Ahora, la justicia concluyó que el gobierno de Biden no logró justificar el fin de la operatoria y opinó que su cierre, comunicado en un memorándum del Departamento de Seguridad Nacional, fue “arbitrario y caprichoso”.

El mecanismo “Quédate en México” fue uno de los primeros blancos que derribó la administración demócrata al llegar al poder, permitiendo que más de 10 mil personas siguieran sus trámites migratorios en territorio estadounidense.

Se opusieron a la reactivación del programa los jueces más progresistas, Stepehn Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan, pero se impuso la mayoría conservadora que se consolidó durante la gestión de Trump.

Ahora, Washington deberá hacer “esfuerzos de buena fe”, según dice el fallo, para retomar la implementación del plan, mientras otros litigios siguen su camino.

El Departamento de Seguridad Nacional ya anunció que impugnará la decisión.

Misuri

A mediados de agosto, el juez federal de Texas Matthew Kacsmaryk ordenó la reinstauración del programa en un Estado que afronta una oleada de inmigración irregular.

El magistrado consideró que la nueva administración desestimó los beneficios de “Quédate en México”.

Además de Texas, Misuri, otro Estado gobernado por el Partido Republicano, emprendió acciones legales para implementar el programa creado por Stephen Miller, un polémico funcionario de Trump criticado por su visión nativista.