Los acusados habían residido en el extranjero y, al regresar, importaron rodados destinados a supuestas personas que gozaban de franquicias aduaneras
El Juzgado Federal Nº 3 de Córdoba ordenó sendos procesamientos a personas que estarían llevando a cabo maniobras ilícitas, relativas a la importación de vehículos importados, bajo el amparo del beneficio dispuesto por la Resolución Aduanera Nro. 1568/92, por parte de ciudadanos argentinos residentes en el exterior, que retornaban definitivamente al país.
El tribunal precisó que las conductas acreditadas consistieron “en haber sustraído al control aduanero, cada uno desde sus respectivos roles asumidos en función de lo proyectado, que no era otro que el de conseguir un tratamiento fiscal más favorable, la importación de un automotor simulando que la importación era para una persona que gozaba de una especial franquicia como es la que reconoce la normativa aludida”.
Precisamente, “aquí estamos frente al caso de una persona –Guido– que desea ingresar un automóvil que no puede importar, pues no satisface los requisitos legales, y para superar tal escollo utiliza como cubierta la franquicia de un residente en el extranjero –Manrique, Bracamonte y Acuña- que adquiere por un precio”, manifestó la decisión judicial.
Doctrina
Según el fallo, se dio lo que en doctrina se denomina como “venta de franquicias’ en oposición al ‘desvío de uso’ que tiene lugar cuando la importación se cumple para el beneficiario, pero este transfiere la unidad antes del plazo permitido; en la ‘venta de franquicia’, en cambio, se falsea el verdadero destino que se la da al vehículo importado, el cual no es adquirido con fondos propios del discapacitado (aquí serían los residentes en el extranjero que regresan al país), sino de un tercero –que sería Guido– obviamente impedido de acceder al régimen de la franquicia”.
Los imputados Diego Esteban Guido, Natalia Paola Manrique y Fernando Rodolfo Acuña fueron considerados probables coautores y partícipe necesario este último, del delito de contrabando agravado por el número de intervinientes relativo a la importación de una camioneta marca Jeep Cherokee Laredo.
Otros imputados
Guido, así como Walter Alejandro Bracamonte y Andrea Viviana Fernández, fueron imputados como probables coautores y partícipe necesaria esta última, de contrabando agravado por el número de intervinientes relativo a la importación de la camioneta marca Jeep Grand Cherokee Laredo, mientras que al mismo Guido y a Acuña se los sindicó como coautores de contrabando relativo a la importación de la camioneta BMW X5 y a los hermanos Darío Cejas y Javier Cejas se los procesó como probables coautores de encubrimiento de contrabando relativo a la importación de las camionetas en cuestión.