Los familiares de tres de las víctimas fatales de la trágica explosión ocurrida en la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC ) presentaron en la Justicia federal demandas laborales por un total de seis millones de pesos.
Estos casos, en promedio de dos millones de pesos cada uno, se refieren a los investigadores Miguel Mattea, Gladys Baralla y Damián Cardarelli, quienes junto a Carlos Ravera, Liliana Giacomelli y Juan Politano fallecieron a causa del siniestro del 5 de diciembre pasado, registrado en la planta piloto de la Facultad de Ingeniería .
La presentación de las abogadas de los demandantes, Cristina Azocar y Ana Albuixech, se extiende a la firma De Smet, que había llevado los tanques de hexano al laboratorio, y a la Aseguradora de Riesgo del Trabajo (ART) contratada por el Estado.
En las denuncias, argumentaron, entre otros ítemes, que los tambores de hexano que ocasionaron las explosiones estaban a la vista de todos y era responsabilidad de la Universidad controlar su ingreso y permanencia.
Ante la inminencia de las demandas contra la UNRC, el titular del Área Jurídica de la casa de estudios, Hubo Abraham, advirtió que la vía judicial será larga y puede concluir en la Corte Suprema de Justicia. Además, precisó que por reglamento no habrá arreglos extrajudiciales.
VÍCTIMAS |
Al momento de ocurridas las explosiones había en la planta piloto24 personas -entre alumnos y docentes- que realizaban ensayos. Seis de ellos murieron. |