ESCUCHAREs parte de una campaña en Estados Unidos que se proyectó globalmente. Aseguran que dotaría de mayor estabilidad a la compañía a largo plazo y aportaría a su “transparencia”
Fue hace poco más de 15 días cuando los accionistas de la empresa Twitter se reunieron para votar sobre una serie de temas, entre ellos una propuesta para explorar la viabilidad de que la popular plataforma social se convierta en una cooperativa democrática de propiedad de los usuarios. Aunque fue rechazada, obtuvo suficientes votos para volver a presentarse en la reunión general anual del año próximo de los accionistas de Twitter.
Hasta ahora, la red es una empresa privada de propiedad participada, esto es que cotiza en bolsa. En ese camino, sufre una serie de sobresaltos derivados de los ingresos y egresos de fondos especulativos sobre su cotización, que buscan rendimientos de corto plazo y, cuando no los obtienen, derrumban los precios.
“En 2016, hemos visto como se ponía en juego el futuro de Twitter”, declararon los accionistas de ésta Steffen Sauerteig y Jim McRitchie, impulsores de la cooperativización de Twitter. “Por este motivo, queremos que la compañía tenga más en consideración a los usuarios, que son quienes otorgan valor a la plataforma”, explican.
Por otro lado, la compañía ya ingresó en un corredor negativo de largo plazo en la consideración de los brokers de los mercados de valores, porque consideran que la red no tiene futuro frente a Facebook. “Las acciones de la compañía no se valoran como corresponde debido a que la bolsa se fija sólo en el crecimiento”, precisó -por su parte- Sonja Trauss, una de las usuarias de la red social que demanda la creación de una cooperativa.
Efectivamente: desde noviembre de 2013, las acciones de Twitter perdieron un tercio de su valor porque los inversores ya no creen que la red social pueda equipararse a Facebook. Twitter cuenta con 313 millones de usuarios activos al mes, mientras que, sólo el año pasado, se crearon 269 millones de perfiles nuevos en Facebook, que elevan la base de usuarios hasta casi 1.900 millones.
La idea de que Twitter se convirta en una cooperativa de usuarios surgió el año pasado, después de que compañías como Google y Salesforce perdieron el interés en adquirir la empresa, según develaron entonces personas cercanas a las negociaciones de venta. La petición para “liberar a Twitter de Wall Street” contó con miles de firmas y fue presentada ante los accionistas en mayo.
Trauss y los impulsores de la iniciativa necesitaban el apoyo de al menos un accionista que hubiese poseído acciones de Twitter durante más de un año. Alexander Chiang, quien actualmente cuenta con 190 acciones de Twitter por valor de 3.275 dólares, fue el patrocinador oficial de la resolución de Trauss que no pasó el pleno del cónclave, pero que sigue en agenda para la próxima asamblea de accionistas.
Junto a su propuesta, Sauerteig y McRitchie pidieron a la compañía que contrate a asesores para que le aconsejen sobre cómo pueden transformarse en un cooperativa y que analicen las estructuras que adoptaron el equipo de fútbol estadounidense Green Bay Packers y la agencia de noticias Associated Press. McRitchie es uno de los principales partidarios de la gobernanza cooporativa en Estados Unidos y una de las personas que más apoyan las propuestas de accionistas corporativos. En los años 70, McRitchie asesoraba varias empresas en California sobre cómo convertirse en cooperativas de trabajadores.
La propuesta de Sauerteig y McRitchie sugirió: “Si Twitter es controlada por su propia comunidad de usuarios, habrá más transparencia y se podrán establecer normas más específicas contra los abusos. Podríamos volver a publicar los datos de la plataforma para incentivar la innovación. En general, invertiríamos en el éxito y la sostenibilidad de Twitter”.
El agrupamiento cooperativo estadounidense NCBA Clusa sigue apoyando esta iniciativa, más allá de su freno temporario. “La sociedad tiende hacia una economía más inclusiva, en la cual los individuos tienen voz en los servicios y productos que utilizan. El modelo cooperativo está perfectamente preparado para proporcionar un enfoque democrático y de principios a la propiedad de los usuarios “, dijo John Torres, vicepresidente de Comunicación de NCBA Clusa. “Seguiremos apoyando la exploración del uso de negocios cooperativos como una solución escalable, sostenible y democrática”, agregó.
Aunque la expectativa de que la iniciativa fuera aprobada era baja, la campaña social #BuyTwitter “sirvió para elevar el perfil de la solución cooperativa a una etapa nacional y global”, consideran en el agrupamiento.
Los organizadores y los grupos de soporte esperan que el interés generado durante los últimos meses continúe creciendo, lo que llevará a un mayor apoyo y una mejor comprensión del modelo de negocio cooperativo entre los accionistas de Twitter y los inversores por igual.
