“La crisis internacional llegó a Córdoba de manera más tardía que en los países del llamado primer mundo y por lo tanto los coletazos y la conflictividad también llegaron más tarde, pero se dieron con gran fuerza”, asegura el abogado laboralista Ricardo Giletta, integrante de la comisión directiva de la Asociación Argentina del Derecho Laboral Córdoba.
“Cuando se comienzan a avizorar los primeros signos positivos en la economía, crece el nivel de conflictividad en cuanto a lo que son los reclamos salariales y cae el que tiene que ver con el mantenimiento de la fuente laboral, que se dio con mayor exposición mientras los efectos de la crisis eran más profundos. Ahora se nota que ha crecido enormemente la conflictividad judicial; es decir, los pleitos que llegan a la instancia judicial porque no han encontrado solución en una etapa anterior”, explicó el especialista a Comercio y Justicia.
En ese marco, precisó que la afirmación es fácilmente demostrable con el crecimiento progresivo que han tenido en “mesa de entrada” las causas. “Yo diría que se han duplicado con respecto a las ingresadas durante el año anterior”, explicó.
“Esto quiere decir que ahora existe el doble de litigios laborales individuales (despidos, escalafonamientos, salarios, etcétera) sin solución que en 2008. En muchos casos, porque las empresas no tienen posibilidades reales de pago; es decir, se despide al empleado sin pagarle lo que le corresponde porque la empresa no cuenta con el dinero, entonces el trabajador recurre a la vía judicial y no se logra un acuerdo previo a esa instancia por la falta de dinero”, especificó.
Al respecto, una investigación publicada en un matutino nacional asegura que durante 2009 los juzgados laborales recibieron casi 60 por ciento más de juicios por accidentes o enfermedades de trabajo que en 2008. Y continúa: “Por cada centenar de causas que se receptaban en 2004, en 2009 ingresan algo más de 1.100 acciones judiciales. Adicionalmente, durante el primer semestre de 2009 se abrieron 16.672 litigios y las proyecciones del sector asegurador indican que durante todo 2009 el número treparía a 43.135, mientras que en 2008 las demandas fueron 27.170”.
Es importante destacar que “por cada diez mil trabajadores asegurados, en 2008 hubo 58,8 litigantes; mientras que en el sector de la construcción la tasa fue de 51,2. Asimismo, en la economía en general se verificaron 35,6 reclamos por cada diez mil trabajadores, cinco veces más que en 2004”.
En el artículo se asegura que la jurisdicción con mayor litigiosidad es Córdoba, donde se iniciaron 210,10 acciones por cada diez mil asegurados, seguida por Mendoza y Santa Fe, la provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma.
Este crecimiento de la conflictividad a nivel judicial encuentra una de sus causas en la “falta de solución a la demorada reforma de la Ley de Riesgos del Trabajo”, según indicó Giletta y al respecto, agregó que existe un proyecto de ley (del cual fue parte) del Ministerio de Justicia de la Provincia, que busca reformar el Código Procesal Laboral de Córdoba.
La idea es reforzar la figura de la Secretaría de Trabajo de la Provincia, “para que los acuerdos a los que se llega en esa instancia queden cerrados y no dejen espacio para el reclamo por la vía judicial”, explicó.
De hecho, muchos de los acuerdos a los que llegan empleados y empleadores en la instancia de la negociación en la Secretaría de Trabajo, son luego echados por tierra al recurrir el empleado a la judicialización