“Nuestra actividad está estrechamente ligada a la construcción, por lo que, cuando hay menos de esa actividad, nosotros tenemos menos trabajo”, indicó Ernesto Lippi, arquitecto y titular de la Federación de Instituciones de Instaladores Gasistas, Sanitaristas y Afines de la República Argentina (Feigas).
“La mano de obra de la instalación acumula en lo que va del año una caída del 30% promedio”, especificó el especialista a Comercio y Justicia.
-¿La llegada de los primeros fríos no logró revertir la situación?
-Se ha dado un 15% de aumento en la actividad en estos últimos días, pero incluso esa suba es menor a la que se daba en otros años. Como para dar una idea, el año pasado y anteriores instalábamos alrededor de 70 nuevos medidores de gas por día; este año, apenas si llegamos a la mitad, sólo en Córdoba. Eso da una idea del escaso movimiento de nuevos usuarios que hay.
-¿Y con respecto a la manutención de los artefactos?
-Los meses de junio, julio y agosto son en los que normalmente tenemos el pico de trabajo del año, pero 2009 parece que no es así. Falta concientización en la gente. Pocos saben o cumplen con el mantenimiento de los artefactos que debe hacer una vez al año un gasista matriculado de confianza.
-¿Qué cosas considera necesario tener en cuenta?
-Hay que vigilar que en cada ambiente en el que hay un artefacto que consume oxígeno (estufa, calefón, termotanque, cocina, etcétera) esté colocada la rejilla de ventilación reglamentaria. Además, hay que controlar que la llama, el fuego de estos artefactos sea de color celeste y no amarillo o naranja, porque esa coloración indica que no hay buena oxigenación en el ambiente y esto puede ser perjudicial, incluso ser causante de muerte.
-Volviendo al nivel de actividad, el plan canje de línea blanca que lanzó la presidenta Cristina Fernández en enero, ¿significó alguna reactivación en el sector?
-En Córdoba, no se vendió ni un sólo artefacto de los que estaban incluidos en el plan. En Buenos Aires, se vendieron 50 mil unidades. Ahora, lo que sucedió en Córdoba es que una sola cadena comercializadora es la que ofrece los artefactos que pertenecen al plan, al resto de los centros de compras no les interesa ofrecerlos, porque no son redituables a sus intereses. No les interesa promover esta venta porque es una buena opción para el público consumidor y no para el comercio.