ESCUCHAR
El ministro De Vido anunció la caducidad de la licencia y dio 90 días a los usuarios para buscar otro proveedor
Más de un millón de usuarios en todo el país, miles de trabajadores directos y otros tantos indirectos, por medio de los call center, fueron sorprendidos ayer con el anuncio de que deberán migrar de la empresa Fibertel.
El ministro de Planificación, Julio de Vido, informó sobre una resolución que declara la caducidad del permiso que tenía Fibertel como operador del servicio de Internet y transmisión de datos. El funcionario dijo que los usuarios tendrán 90 días para cambiar de empresa antes de quedarse sin el servicio. “El permiso de Fibertel no está más vigente porque, tras la absorción por parte de Cablevisión, la empresa decidió su propia disolución” sostuvo De Vido. El ministro dijo que la compañía incumplió la legislación vigente y que la fusión “nunca fue aprobada por el Estado Nacional”.
Según la explicación oficial, la ley no permite el traspaso de las licencias al cambiar la titularidad de los operadores. La decisión oficial, comunicada en conferencia de prensa al mediodía, tuvo impacto importante en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, en la que cotiza el grupo Clarín. Sus títulos descendieron al final de la ronda 5,75 por ciento, con un pico de ocho por ciento en la media rueda.
Fibertel representa 14 por ciento de los ingresos del conglomerado, compuesto por sus canales de televisión, diarios y servicios de cable.
Las diferencias entre el Gobierno y el grupo Clarín datan de un tiempo y de hecho había una notificación de la Secretaría de Comunicaciones vinculada con los servicios de Internet, medio de comunicación que experimentó en los últimos años un explosivo avance. De hecho, Fibertel llegó a capturar un tercio del mercado por fuera de las dos firmas telefónicas monopólicas en el país. Para ello utilizó el cable módem que suministra para entregar las señales de TV por cable.
Según un reciente editorial del diario la Nación, afín al diario Clarín, existe un ansia de control de este medio que apunta a las puertas de acceso a la red, debido a que representa un fuerte negocio con vistas al futuro. Cablevisión y algunos programadores de televisión premium están presentando la televisión por Internet, que incluirá la posibilidad de acceder por la web a los contenidos hasta ahora restringidos a la red de cable. Ambas tecnologías tienen regulaciones distintas: la TV paga está contemplada en la ley de medios, Internet no, señaló el diario.
En su resolución, el Gobierno argumentó que la licencia pertenecía a Fibertel, firma que se integró en Cablevisión, y que “en la legislación argentina las licencias son intransferibles”.
Respuesta empresarial
Cablevisión anunció en un comunicado que impugnará de inmediato la medida en defensa de sus clientes, ya que aquélla no tiene sustento legal ni fáctico.
“La compañía viene brindando su servicio sin interrupciones de ningún tipo. Desde 2003, Cablevisión es la titular de la licencia que opera con la marca Fibertel, tras la absorción societaria de esta última, que fue aprobada por la Inspección General de Justicia”, expresó la compañía.
Agregó que “Cablevisión seguirá brindando con normalidad el servicio de Internet mientras defiende en todas las instancias correspondientes sus derechos y los de sus clientes, los mismos clientes que han convertido a Fibertel en el servicio más confiable, en el de mayor velocidad y desarrollo tecnológico, en el único con tarifas nacionales e igualitarias para todo el país y en el primero que no depende de la red telefónica”.
“Cablevisión ejercerá todas las acciones administrativas y judiciales, tanto en el fuero civil como penal, para defender sus legítimos derechos y velar por la continuidad de sus servicios con la más alta tecnología, tal como lo viene haciendo hasta la fecha”. La empresa ya había respondido que “la absorción societaria se realizó en 2002 y fue aprobada por la Inspección General de Justicia (IGJ), que es el organismo competente para este tipo de operaciones”. Cablevisión asegura que tiene los derechos como continuadora universal de Fibertel. Esta absorción societaria se realizó en 2002, mucho antes de la fusión con Multicanal, fue aprobada con Fibertel y venía prestando servicios sin ningún tipo de cuestionamiento, de acuerdo con la firma.
