Los nuevos conflictos y necesidades que se generan en la sociedad demandan adaptaciones y transformaciones en la práctica profesional del abogado que supere su mero rol de litigante. La reflexión corresponde al decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Córdoba, Pedro Yanzi Ferreyra, quien opinó que el abogado tiene que cumplir además “un rol social e institucional”.
Teniendo en cuenta las circunstancias actuales, la carrera de abogacía modificó su plan de estudios en el 2000. Desde esa fecha se apuntó a un perfil “generalista” del nuevo profesional que contempla, entre los roles del egresado, el de abogado asesor, litigante, mediador e investigador, explicó Yanzi Ferreyra.
Asimismo, y con el objetivo de dotar de mayor práctica a los egresados, el decano precisó que se incorporaron talleres de jurisprudencia, práctica profesional y procesal, clínicas jurídicas y materias relacionadas con los métodos alternativos de resolución de conflicto como la mediación. “El rol mediador del abogado se ha acrecentado, sobre todo en el fuero laboral y de Familia ”. De igual modo, señaló como fundamental “limpiar la imagen del abogado y cumplir con el rol social para lograr libertad, justicia, paz e independencia de los poderes”.