La persistente sequía en casi toda la región agrícola agudiza la situación de los cultivos, en especial trigo y maíz, y se esperan disminuciones en los rindes previstos de entre un 10 y un 15%, además de la superficie cosechable, sólo parcialmente reversible con abundantes lluvias.
A la “crítica situación del trigo en Córdoba, Santa Fe y La Pampa, donde se aguardan significativas mermas productivas”, se agregan “nuevos plantíos en situación de riesgo en zonas de Buenos Aires como en las áreas norteñas”, indicó un informe de la Bolsa de Cereales.
“En el oeste, los cultivos comienzan a desmejorar y a ello se suma además los daños ocasionados por el frío en Salta y Tucumán que han disminuido las posibilidades productivas”, afirmó la entidad.
La situación actual perfila un “rendimiento por hectárea a nivel nacional hacia una baja, tentativamente estimada entre un 10 y un 15% respecto de la campaña precedente”; y los “recortes en el área que se abandonará a la cosecha impactarán también en el volumen de la producción, que podría caer un 25%”, arriesgaron.
Pese a que las lluvias serían escasas en los próximos días, para principios de octubre se esperan precipitaciones generalizadas que permitirían “recomponer paulatinamente las reservas de humedad, logrando su normalización hacia fines de ese mes”, se ilusionó el informe.
En el caso del maíz, la sequía en las principales regiones retrasa la siembra, que al viernes alcanzó las 107 mil hectáreas, 4% de la superficie inicialmente proyectada.
Además del clima seco, el “alto valor de los insumos básicos (fertilizantes nitrogenados-semillas), bajo retorno de la inversión y el alto capital requerido, promueven la retracción del área destinada a la producción de grano comercial”.
Para la Bolsa de Cereales, la superficie dedicada al maíz será de 2,7 millones de hectáreas, 15,6% menor a la implantada durante la zafra 2007/08, pero podría caer aún más de si no llueve, advirtió. Sin embargo, como la ventana de siembra se extiende hasta octubre, las intenciones de cobertura maicera líder todavía se mantienen, porque se podría retrasar la siembra hasta noviembre-diciembre, esperando mejores condiciones climáticas.