Es el costo fiscal por encima del presupuestado en caso de acordar con los gremios una suba de 30% escalonado para el año próximo. El porcentaje es el que ya deslizaron algunos gremialistas tras el acuerdo logrado por los policías. De cerrarse en esos términos y mantenerse los ingresos según los pautados, con una suba de 24% interanual, se licuaría buena parte del superávit corriente y, si no se ajusta la obra pública, habrá rojo financiero.
Las cuentas públicas provinciales podrían ingresar en déficit primario el año próximo si eventualmente los agentes públicos lograr un acuerdo salarial en torno a 30 por ciento y los ingresos se mantienen conforme los presupuestados para 2014. La hipótesis es ciertamente posible en función de los diferentes escenarios que se manejan en el Ministerio de Finanzas a partir de los reclamos salariales de los estatales para febrero próximo.
La alternativa fue elaborada por Comercio y Justicia con base en un eventual reclamo de 30 por ciento de aumento escalonado para 2014 y a una proyección de ingresos con una suba interanual del 24 por ciento, en línea con la proyectada en la flamante Ley de Presupuesto para el año próximo.
Con todo, la hipótesis está por debajo del 33 por ciento que lograron los policías, según aseguró días atrás el ex jefe de Gabinete, Oscar González. Este medio intentó desde entonces y de manera infructuosa precisiones desde el Ejecutivo sobre la correcta liquidación del acuerdo salarial con los uniformados desde febrero. En ese marco, el 33 por ciento mencionado por González es al fin la referencia que tendrán los gremios para 2014, según coincidieron en diálogo con Comercio y Justicia fuentes sindicales consultadas.
En esa línea -tomando como posible un aumento de 30 por ciento escalonado en tres tramos, con 16 por ciento en febrero, siete por ciento en julio y un porcentaje similar en octubre- la masa salarial para 2014 se dispararía de los 21.044,9 millones de pesos estimados en el Presupuesto a unos 24 mil millones de pesos.
Se trata de tres mil millones de pesos extra que se suman a una cifra prácticamente similar de aumento que ya había sido previsionada en el Presupuesto para el año que viene.
Concretamente, de acuerdo con la pauta aprobada días atrás por la Legislatura, la Provincia estimaba cerrar 2013 con una ejecución de masa salarial de 18.030,1 millones de pesos. En tanto, para 2014 preveía partidas para ese concepto por 21.044,9 millones de pesos, esto es 16,7 por ciento superiores a las que terminará ejecutando al cierre del ejercicio en curso.
Esas erogaciones salariales, incluidas en el Presupuesto y que forman parte de los gastos corrientes, van a ser financiadas por ingresos corrientes por 38.607,3 millones de pesos, producto de una suba de 24,06 por ciento en la comparación interanual.
De esta manera, el ahorro corriente previsto para 2014 es de 5.424 millones de pesos. No obstante, si las erogaciones salariales se incrementan prácticamente el doble respecto de las previstas, el impacto será contundente sobre los números estimados.
De mantenerse constante la suba de ingresos conforme lo presupuesto, el ahorro corriente caería a 2.400 millones de pesos.
En la misma línea, de cumplirse la pauta de gastos y de ingresos de capital, el ahorro primario (previo pago de intereses de deuda) se deberá ubicar en 1.475,1 millones de pesos.
Con todo, si el ahorro corriente baja de los 5.424 millones de pesos a $2.400 millones producto de la fuerte suba de las partidas salariales, la Provincia incurriría en déficit primario. Es que el superávit corriente ya no alcanzaría para cubrir el rojo derivado de las fuertes erogaciones de capital previstas, de 6.006 millones de pesos que no logran compensarse con los ingresos de capital de 1.524 millones de pesos.
Así, el déficit primario en ese nuevo escenario se situaría en 1.358 millones de pesos.
A ese rojo habría luego que sumarle el pago de intereses de deuda para llegar al resultado financiero. Si bien la Provincia no tendrá que pagar los vencimientos de 2014 con la Nación, hay otros compromisos por atender que profundizarían un cierre deficitario.
Un escenario de ese tipo exigiría a la Provincia ajustar las erogaciones de capital y de esta forma imprimir un fuerte freno a la obra pública.
Con todo, el panorama no es necesariamente tan sombrío.
Muy problablemente la Provincia logre ingresos corrientes por encima de los presupuestados. De hecho, esa pauta estimativa siempre aparece subvaluada respecto a la posterior ejecución. De hecho, este año, los ingresos se mantienen mas de 10 puntos porcentuales por encima de la estimación original.
De cualquier manera, desde Finanzas admiten que el crecimiento de la recaudación en 2014 no se ubicará “ni por asomo” en los porcentajes interanuales de este año.
En ese contexto, será clave el margen de maniobra de la Provincia para negociar con los estatales, que estará claramente atado también a la evolución de la inflación, acelerada particularmente en el último mes.
Paralelamente, serán fundamentales los eventuales acuerdos que logre la Provincia con el Gobierno nacional, entre ellos una cobertura del rojo de la Caja de Jubilaciones y también una mejora del contrato de EPEC con Cammesa que permita a la Provincia dejar de aportar al menos parte de los fondos que eroga todos los meses por el bono en dólares emitido para financiar la central Pilar.
De hecho, parte del ahorro financiero que prevé la Provincia para 2014 se licua con las transferencias que debe realizar a la Caja y a EPEC por el título en dólares. En el primer caso, el monto estimado para el año que viene ronda los mil millones de pesos en tanto que para EPEC, se ubica en casi 400 millones de pesos, sin contar la evolución del tipo de cambio oficial que ajusta el valor de la cuota en dólares.
Por lo pronto, la Provincia buscará cerrar esta semana y al menos hasta los primeros días de febrero, la discusión salarial con los gremios a partir del plus navideño ya propuesto.