La inversión en trabajos públicos hasta mayo subió 113,86% respecto a 2021. Con todo, los ingresos totales crecieron 61,5% mientras que las erogaciones escalaron 65%. “La foto” a mayo aún no mostraba cambios sustanciales en la evolución de las cuentas públicas. El panorama tenderá a deteriorarse en los meses siguientes
La Inversión Real Directa (IRD) de la Provincia de Córdoba al 31 de mayo pasado alcanzó 26.083,9 millones de pesos, 113,86% superior a la registrada en el mismo período de 2021.
El incremento, que prácticamente duplicó la inflación observada en ese lapso (60,7%, según Indec), confirmó así una dinámica que ya venía observando la Ejecución Presupuestaria en meses anteriores y que es, precisamente, uno de los sellos de la gestión de Juan Schiaretti: ahorro corriente y fuerte inversión en obras.
De hecho, si se observa los números a mayo, no hay cambios sustanciales en la estructura de la ejecución presupuestaria con relación a meses anteriores.
Con todo, la foto podría resultar vieja en breve. Es que la volatilidad de las diferentes variables económicas, entre ellas la inflación y los tipos de cambio paralelos, observados tras la salida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía, podrían hacer variar los números, particularmente en los meses subsiguientes, con un deterioro en los principales indicadores.
Más aún, el propio Schiaretti admitió la semana pasada su preocupación por el panorama, con una inflación “galopante” y un escenario en el que, más allá de las cifras positivas de las cuentas públicas, un sacudón en la macro no será indiferente para Córdoba.
Los números a mayo
De acuerdo con la Ejecución Presupuestaria al 31 de mayo, los ingresos corrientes de la Administración Pública no Financiera (APFN) que incluye a la Administración Central, la Caja de Jubilaciones y las Agencias, alcanzó a 378.261,2 millones de pesos, 62% mayor que la de un año atrás.
En tanto, los gastos corrientes treparon a 280.826,2 millones de pesos, 60,22% superiores a 2021.
Dentro de ese rubro, las erogaciones en personal se ubicaron en 114.846,5 millones de pesos, 62,8% más elevadas que las de un año atrás y levemente por encima de la inflación.
De esta manera, el resultado económico esto es el ahorro corriente del período fue de 97.434,9 millones de pesos, 67,3% por encima del año pasado.
En cuanto a los ingresos de capital, llegaron a 5.167,7 millones de pesos, 34,1% mayores a 2021.
Por su parte, los gastos de capital se situaron en 32.975,5 millones de pesos, 122,12%. Dentro de ese concepto, la IRD, esto es la ejecución de obras públicas, llegó a 26.083,9 millones de pesos, 113,86%. Ese incremento contundente en los fondos destinados a trabajos públicos se viene repitiendo desde hace ya meses, primero ante la baja base de comparación producto de las ejecución de gastos en pandemia pero luego ya por la obtención de fondeo externo que apuntaló parte del ahorro corriente destinado a cubrir la inversión en obras.
De esta manera, los ingresos totales se ubicaron en 383.428,93 millones de pesos, 61,53% por encima de 2021.
En tanto, los gastos totales alcanzaron a 313.801,76 millones de pesos, 65,06% más elevados que durante el año pasado.
Esos datos muestran, así, que las erogaciones crecen por encima de los ingresos. En rigor, esa dinámica ya se había observado meses anteriores. Mientras esa diferencia no sea sustancial, el tema no resulta preocupante. Ahora, si esa diferencia se sostiene en el tiempo y la brecha se amplía, sí será un problema concreto.
Por ahora, el resultado financiero de la Provincia para el consolidado de la APNF se ubicó en 88.729,5 millones de pesos, más de 40 mil millones por encima de un año atrás.
Presión sobre el gasto
La situación que hasta ahora surge holgada, seguramente comenzará a deteriorarse con el correr de los meses.
Es un hecho que admiten en el Centro Cívico que en algún momento la recaudación comenzará a ceder, ya sea porque el nivel de actividad no se sostenga -ya hay síntomas de estancamiento que podría agudizarse por la falta de insumos importados- y el consumo caída, señal que también quedó al descubierto con los últimos datos disponibles.
Por contrapartida, habrá mayor presión sobre el gasto. Además de la suba exponencial de los costos de la obra pública, ahora se sumará la reapertura de las paritarias de los estatales que, tal como anticipó en las últimas horas Comercio y Justicia, buscarán 80% de aumento anual. Hasta ahora lograron un 30% entre febrero y mayo aunque con la promesa de reabrir la negociación recién en agosto. Los gremios quieren que cualquier aumento extra sea retroactivo a julio a tenor de una inflación que lejos de desacelerar, sigue aumentando.
Con el reinicio del ciclo lectivo desde hoy, la UEPC retomará su reclamo para reabrir las paritarias en lo inmediato.
Según pudo conocer este medio, ya hubo contactos informales entre el Gobierno y los gremios para analizar eventuales escenarios que incluyan subas escalonadas de aquí hasta enero inclusive.