El consumo creció 1,7% interanual en julio y registró así el primer resultado positivo desde abril de 2020, época de inicio del aislamiento impuesto por la pandemia, cuando el incremento había sido de 4,1%, según un estudio privado.
“Si bien se compara con una base negativa, la misma fue de -0,5%, por lo tanto, el +1,7% logrado supera la caída sufrida en 2020”, consignó el trabajo dado a conocer ayer por la consultora Scentia.
Este cambio en la tendencia se explica por el buen desempeño en el canal Supermercados, que registró un crecimiento de 5,4% con relación a 2020, y la importante desaceleración en la caída que arrastraban Autoservicios, que cerraron ese mes con una baja de sólo 1,4%.
En el caso del canal Autoservicios, el informe señala una retracción importante en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA, -9,8%), mientras que el interior se comportó de manera positiva (+4,3%).
En menor medida, también las cadenas tuvieron un mejor resultado en el interior, situación que podría explicarse por el traslado de gente durante las vacaciones de invierno.
De esta manera, en el acumulado del año el consumo aún se ubica 6,2% por debajo de igual período de 2020.
Esto plantea “el desafío para los próximos meses de lograr las variaciones positivas suficientes para equilibrar esta negatividad”, resaltó la consultora.
Las canastas que aportaron de manera positiva a este resultado fueron las de bebidas, perecederos/frío e impulsivos; mientras que los segmentos que operaron en baja fueron alimentación, desayuno y merienda, limpieza de ropa y hogar, e higiene y cosmética.
Con relación al precio promedio ponderado, continúa su carrera ascendente llegando a 45,7%, agrega el informe.