ESCUCHAREl Gobierno suscribió acuerdos con empresarios de ambos sectores, a quienes agradeció por el esfuerzo. Se mantiene la lógica de que el Estado dirija los aumentos
El ministro de Economía, Sergio Massa, confirmó la rebaja de hasta el hasta el 20% promedio en los precios del calzado deportivo y anunció un acuerdo de precios para el sector de los medicamentos. De este modo se sostiene la política del gobierno de intervenir directamente en el punto de origen de los precios.
Calzados
El entendimiento se selló con las principales empresas fabricantes de zapatillas. Las rebajas contempladas serán a partir de los precios vigentes al mes de diciembre en las marcas y modelos de zapatillas de mayor rotación en el mercado. Esperan poder extenderlo al resto de la indumentaria deportiva.
Dentro del mismo acuerdo se prevé un sendero de aumento de precios de hasta el 3% para los meses de enero, febrero, marzo y abril, lo que situará a muchos de los productos en un valor similar al que tienen actualmente.
Durante el encuentro con distintos actores del sector, el ministro de Economía aseguró: “A veces, las discusiones son agradables y otras veces son desagradables. Todos buscamos lo mismo: que haya mayor producción y comercialización de calzado deportivo en la Argentina. Que la gente lo pueda comprar, consumir”.
“El principal desafío es que todas las reglas macroeconómicas contribuyan a bajar la inflación. En el puente, en la transición de ordenamiento de esas reglas, necesitamos sostener los niveles de inversión, la generación de empleo y precios justos para la gente”, consideró el ministro.
Luego, dirigiéndose a los empresarios, sostuvo que “para eso necesitamos hacer un esfuerzo entre todos. Nosotros hacemos el esfuerzo de tratar que los dólares que juntamos vayan a la producción y al trabajo argentino”.
Medicamentos
Por el lado de los medicamentos, el anuncio de este jueves fue sobre un acuerdo con las cámaras del sector farmacéutico para regular los aumentos en los precios de los medicamentos desde el 31 de diciembre de este año hasta el 31 de marzo del 2023.
A partir de este acuerdo, el precio de los medicamentos sólo podrá aumentar hasta un 3,8% mensual, teniendo en cuenta el último precio sugerido de venta al público del mes de noviembre de 2022.
También se prevé una cláusula gatillo por la cual, en caso de que la inflación supere el 5%, al mes siguiente las empresas podrán aplicar un aumento hasta un punto por debajo de la medición del INDEC.
Forman parte de dicho entendimiento con el sector los medicamentos de venta bajo receta y quedan excluidos los de venta libre. En ese marco, Massa recalcó que “los medicamentos en la vida cotidiana de la gente son súper importantes” por lo que agradeció “el esfuerzo” de los empresarios al participar en este acuerdo.
Inflación
De esta manera, el Ministerio de Economía destacó que “continúa impulsando medidas con el objetivo de llevar estabilidad a los precios de los principales productos de consumo masivo y así darles previsibilidad y alivio a los argentinos, además de recuperar el poder de compra de los salarios”.
Las palabras del ministro son calcadas a las que repite ante cada nuevo anuncio de este tipo, que se suceden día tras día. Ante la necesidad de poner algún freno a la inflación, el gobierno volvió a echar mano a esta iniciativa de regulación de precios que implica un cambio de nombre a lo que ya probó tantas veces sin éxito.
A menos de un año de las elecciones, el esquema de Precios Justos parece estar orientado por la máxima “lleguemos justo” a las urnas. Massa es consciente de que todos estos congelamientos, incluso no sobreviviendo a las metas originales, le permiten al gobierno transitar las fiestas en paz, estirando los magros ingresos con los que cuentan los asalariados, para pasar el mes al que temen todos los gobiernos que no pueden ordenar las cuentas.
El razonamiento del ministro según el cual se cuidan los dólares por ser productos producción local está teñido por el mismo infantilismo de los economistas que llevan más de medio siglo pidiendo vivir con lo nuestro. No existe la producción nacional en el vacío, pues siempre serán necesarios insumos o maquinaria que sólo puede ser provista por empresas extranjeras.
Este es el motivo por el cual son numerosos los sectores de la industria nacional con demoras en la producción por el nuevo cepo a las importaciones, situación que sigue empujando los precios hacia arriba. No se puede controlar todas las variables de la economía todo el tiempo, o al menos no se lo puede hacer de manera efectiva.
Quizás al implementar estas medidas el gobierno solamente espera que la gente pueda consumir, comprar más bienes. Lo más probable es que en realidad esté tratando de comprar tiempo.
