En lo que fue una extensa audiencia que se prolongó por siete horas, comenzó ayer el juicio de destitución al fiscal de Instrucción del Distrito 1, Turno 3, Gustavo Sandoval.
El debate comenzó a las 9.30 ante el tribunal de Enjuiciamiento de Magistrados, que integran la vocal del Tribunal Superior de Justicia Aída Tarditti y los legisladores Walter Saieg y Domingo Carbonetti (PJ); Rodrigo Serna (Frente Cívico) y Miguel Nicolás (UCR).
Sandoval está acusado de negligencia grave y supuesto mal desempeño de sus funciones, tras una denuncia que fuera presentada por el comerciante Armando Alarcón, en diciembre de 2004.
La audiencia comenzó con la lectura de la acusación y los posteriores alegatos que estuvieron a cargo de la fiscal General adjunta María Marta Cáceres de Bollatti, en representación del Ministerio Público Fiscal; y José Buteler, abogado defensor del fiscal Sandoval.
Tras los alegatos, el juicio pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo lunes, día en que se conocerá si finalmente Sandoval es o no destituido del cargo que ejerce desde hace 11 años.
Acusación
Ante la ausencia del fiscal General de la Provincia, ejerció el rol acusador la fiscal General adjunta, María Marta Cáceres de Bollatti. Al comenzar su alegato, la funcionaria del Ministerio Público advirtió que el caso en cuestión “es inédito en la materia”, teniendo en cuenta que la negligencia de la que se lo acusa a Sandoval es sólo en función de un expediente en particular. Sobre este punto, Bollatti aclaró que la figura de negligencia es “elástica” y aunque se trate de un solo caso, lo importante es conocer su magnitud.
Ya adentrándose en los hechos particulares que se le imputan a este funcionario judicial, Bollatti concluyó que Sandoval “no dispuso acto impulsorio alguno en los siete meses que tuvo a su cargo la investigación”. No obstante, la Fiscalía admitió que durante ese período (desde el 27/09/01 hasta el 17/ 05/02) tampoco lo hizo la defensa de Alarcón.
Asimismo, y en el marco de la acusación, la Fiscalía le achacó a Sandoval su actitud de hacer caso omiso a las instrucciones que le fueron impartidas en dos oportunidades desde la Fiscalía General para concluir la investigación y dictar resolución.
En este sentido, Bollatti calificó la actitud del acusado como de una “constante renuencia a culminar la investigación a través de una conducta, al menos antojadiza”.
Por otra parte, la Fiscalía opinó que si bien la causa del imputado Alarcón estuvo sólo siete meses a cargo de Sandoval, éste tenía el tiempo prudencial para pedir las medidas procesales necesarias tendientes a avanzar en la investigación penal preparatoria. En otro párrafo del alegato, se lo acusó a Sandoval de omitir dictar el sobreseimiento de Alarcón en tiempo y forma- pese a que la causa estaba prescripta- y hacerlo, por el contrario, un año después de extinguida la acción penal.
Bollatti también le cuestionó al acusado no haber informado a la Fiscalía General sobre algún impedimento que le hiciera imposible resolver dicho expediente en los plazos previstos por la ley.
Defensa
El eje del alegato del abogado José Buteler giró sobre tres puntos fundamentales:
n Demostrar que nunca hubo resistencia de Sandoval para atender los requerimientos de la Fiscalía