ESCUCHAREl Río Paraná bajó por tercer mes consecutivo y la situación pone en jaque al sector agroindustrial, en pleno desarrollo de la cosecha gruesa.
Miles de camiones llegan a diario a los puertos del Gran Rosario con soja y maíz. Los granos, valuados en unos 270 millones de dólares, no pueden ser embardados.
En este momento, el Paraná tiene casi un metro de profundidad en su paso por Rosario y la media histórica es de 3,4 metros para esta época del año.
Productores, industriales y exportadores temen que se quiebre el sistema de logística de carga en los buques que amarran desde Timbúes hasta Arroyo Seco.
En un informe, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) se detalló que el nivel del Paraná está al límite de ser navegable en el nodo portuario de la ciudad. En tanto, el Instituto Nacional del Agua prevé que la merma continuará.
Por la escasez de lluvias estivales río arriba el calado efectivo en el río es de 31 pies, lo cual implica un 10% menos de capacidad de carga en cada buque, necesario para posibilitar el tránsito por el lecho del río para salir al mar.
Según estimaciones del Ministerio de Agricultura de la Nación, durante mayo se debería cumplir con la carga en las bodegas de los buques de un mínimo de 7,2 millones de toneladas de trigo, maíz, poroto y harina de soja, un volumen que se debería reducir en casi 730 mil toneladas.
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