Quiere que lo hagan las diez provincias petroleras que forman parte del directorio de la estatizada. Buscan con ello “aliviar” en US$2.450 millones el monto que se le debe abonar a la española por el “acuerdo amigable”.
El gobierno de Cristina Fernández aumentó la presión sobre las diez provincias petroleras que conforman el directorio de YPF con el fin de que emitan unos 2.450 millones de dólares en bonos destinados al pago a Repsol. De lo contrario, les exige entregar áreas de concesión para generar recursos que puedan ser destinados al grupo español.
Son diez los gobernadores de las provincias que conforman la Organización Federal de los Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi), los cuales mantienen un constante diálogo con Miguel Galuccio, CEO de la estatizada YPF.
Chubut, Neuquén, Río Negro, Formosa, Jujuy, Salta, La Pampa, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Mendoza controlan 24,99 por ciento de las acciones de la compañía y 26,03 ha quedado en manos del Estado nacional, que ahora exige a los gobernadores tomar mayor protagonismo.
Diálogo abierto
Los mandatarios provinciales vienen dialogando con los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Planificación, Julio de Vido, además del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; y en escena apareció un gobernador de una provincia que hasta el momento no tiene yacimientos: Sergio Urribarri.
El entrerriano comenzó a cobrar protagonismo fuertemente en el escenario energético tras levantar su perfil político y lanzar su precandidatura a presidente, con la eventual venia y apoyo de la jefa de Estado, Cristina Fernández, para que la suceda en 2015.
Este gobernador formó parte este martes de la comitiva integrada por Capitanich, Kicillof y Galuccio que viajó a Río Negro y Neuquén para observar los avances de YPF en yacimientos donde está invirtiendo la estadounidense Chevron.
La comitiva se trasladó luego al área Los Caldenes, a 30 kilómetros de Cinco Saltos -provincia de Río Negro-, donde la petrolera nacional encontró una reserva de unos 15 millones de barriles en una superficie de 115 kilómetros cuadrados, lo que fue observado por el entrerriano.
Paralelamente, técnicos de YPF vienen trabajando desde 2012 en Entre Ríos para hallar eventuales reservas de crudo y ya delimitaron dos regiones para profundizar los conocimientos geológicos: una es la Zona Paraná y otro la Zona Federación, que incluye parte de Concordia.
Deudoras de la Nación
Urribarri está actuando a la vez como mediador entre la Casa Rosada y los gobernadores que se enojaron cuando el 14 de marzo el Gobierno confirmó ante el Senado que las provincias petroleras pasarán a ser deudoras de la Nación por US$2.550 millones para mantener las acciones que tienen en YPF.
Resulta que la Nación se comprometió a pagar al grupo español Repsol -con bonos escalonados hasta 2033- la suma de US$5.000 millones en concepto de compensación por la estatización de 51% de las acciones de YPF.
De ese monto, unos US$2.550 millones los pagará el Estado nacional y US$2.450 millones tendrán que ser afrontados por las provincias petroleras, dato que sorprendió a más de un gobernador en medio de una ajustada situación fiscal por los desequilibrios económicos generados por la inflación y los aumentos de costos.
Neuquén, por ejemplo, tendría que asumir obligaciones con Nación por 1.024 millones de dólares pero la gestión de Jorge Sapag ya anticipó que no está dispuesta a endeudar a la provincia, algo que generó tensión con la Rosada.
No obstante, en su recorrida por los yacimientos, Capitanich se mostró tranquilo con que se arribará a un acuerdo y deslizó que si las provincias no cuentan con recursos propios podrían pagar con la concesión de áreas de exploración y explotación petrolera.
El funcionario nacional aclaró así que el autoabastecimiento energético del país se puede concretar “en tres años” en la medida que “haya un mayor volumen de financiamiento para maximizar los volúmenes de inversión”, por lo que las provincias tendrán que ceder e incrementar su pasivo estructural.
Fondos para desarrollo
YPF colocó bono por uS$1.000 millones a 10 años y pagó una tasa de 8,75%La petrolera YPF colocó el martes un bono global por US$1.000 millones a 10 años, a una tasa de 8,75 por ciento anual, informó la compañía estatal.
La deuda vencerá el 4 de abril de 2024 y pagará intereses semestralmente; en la colocación participaron unos 300 inversores de todo el mundo.
El monto ofertado superó cinco veces la emisión y se convirtió en el más grande lanzado por una compañía nacional.
Recién en ocho años se hará el primer pago de capital por 30%; seguirá otro 30% en 2023 y el 40% restante se abonará en 2024. Según lo informado, los bancos Itaú, HSBC y Morgan Stanley coordinaron la colocación de las obligaciones negociables de la petrolera.