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Según el Indec, crecieron 19% el mes pasado respecto a igual lapso del año anterior. Un desempeño superior se registró en noviembre de 2008, con 23,8%.
Las ventas en los supermercados se incrementaron durante junio 19% en relación con igual mes de 2009 y, así, el pasado se constituyó en el máximo salto del último año y medio.
De hecho, no se registraba un alza semejante desde noviembre de 2008, cuando el aumento interanual en el consumo básico alcanzó 23,8%, siempre según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
La información oficial de ayer destacó que, de acuerdo con el análisis de los resultados del desempeño de mayo, en la variación interanual se observaron los aumentos más significativos en los rubros de electrónicos y artículos para el hogar con 105,9% y en lácteos y carnes con 31,9% y 31,7%, respectivamente.
El organismo informó -además- que las ventas, a precios constantes y sin efecto estacional, crecieron 2,8% entre junio y mayo.
Por su parte, también a precios constantes, sumaron durante el mes pasado 5.141,1 millones de pesos, con una baja de 1,4% con relación a mayo, y un alza de 31,6% con relación al sexto mes del 2009.
El Indec contabilizó un alza en los precios de 11,1% interanual, y de 0,6% entre mayo y junio.
Los datos corresponden al relevamiento que el organismo oficial realiza mensualmente entre las 67 empresas propietarias de los supermercados distribuidos en todo el país.
Finalmente, y de acuerdo con el valor acumulado en el primer semestre, las ventas se incrementaron 25,9% respecto del mismo período de 2009.
Oportunidad
Por su parte, la ministra de Industria, Débora Giorgi, aseguró ayer que el alza de las jubilaciones y asignaciones sociales que anunció el miércoles la presidenta Cristina Fernández permitirá una suba de 2,3% en el consumo privado y resaltó que ese aumento de la demanda les otorga a los empresarios la oportunidad de generar mayor rentabilidad a partir del incremento de sus volúmenes de producción.
La funcionaria resaltó, mediante un comunicado, que la inversión social de 18.000 millones de pesos que implica el aumento de 16,9% en las jubilaciones y de 22,2% en la Asignación Universal por Hijo, “llega directamente a los 14 millones de argentinos que más lo necesitan e implicará una suba del consumo de 2,3% del consumo interno”.
“La medida genera una oportunidad a los empresarios para que demuestren, en la práctica, su real vocación de actuar con responsabilidad social”, dijo la ministra y afirmó que “mediante la profundización del proceso de inversiones podrán privilegiar obtener más ganancias aumentando el volumen de sus ventas y no los precios”.
Giorgi reiteró que “el modelo productivo en vigencia tiene en su esencia la protección y fortificación del mercado interno”. Y agregó que los aumentos se solventan con “fondos que aporta el Estado Nacional y no los empresarios que -además- se beneficiarán con un alza de la demanda, fundamentalmente en sectores como el alimentario y los de productos de primera necesidad”.
Según explicó la titular de la cartera de Industria, la mayor demanda se dirigirá a sectores que registran actualmente un uso de capacidad instalada de entre 66% y 75%, “lo que les permitirá abastecer el mercado interno sin subir los precios”.
A pesar de las “buenas” expectativas en la actividad “las inversiones no están creciendo en sintonía con la tasa de demanda”
Las expectativas de actividad para el segundo semestre son “buenas” debido a que 54% de los empresarios del país esperan registrar índices de venta similares a los de los primeros seis meses, y 23% prevé obtener “mejores” y “mucho mejores” registros.
Al dar a conocer la encuesta de Expectativas de Ejecutivos que elabora semestralmente el Instituto de Desarrollo Empresarial Argentino (IDEA), el economista Dante Sica dijo que el consumo será el principal propulsor de la economía en el segundo semestre porque los aumentos salariales de 25% promedio van a estar en pleno.
No obstante, Sica advirtió que se generará una cierta “tensión sobre los precios”, porque las inversiones no están creciendo en sintonía con la tasa de demanda, por lo que las empresas van a tener que ajustar sus ingresos de acuerdo con valores al no poder hacerlo por volúmenes.
“Inversión hay. Está en niveles récord, levemente por debajo de 2008. Pero el problema es la falta de dinamismo respecto de la demanda. Esto hace que en algunos sectores industriales comiencen a aparecer algunos cuellos de botella e imposibilidad de abastecer en pleno”, dijo.
