En el marco de declaraciones cruzadas entre trabajadores y empresarios respecto a la puja salarial de este año, el vicepresidente de la Unión Industrial de Buenos Aires, Santiago Iuzzolino, sostuvo ayer que el aumento a otorgar “no tendría que pasar el 10 por ciento”, para preservar los puestos de trabajo. De esta manera, el dirigente oficializó una cifra concreta, porcentaje hasta el cual los industriales podrían estirarse a la hora de conceder incrementos salariales para este año.
“En el contexto de una crisis internacional que está trayendo efectos locales es obvio que hay que hablar de una discusión salarial con cuidado”, advirtió Iuzzolino. Según el empresario, la entidad fabril no tendría “problema en discutir cuál sería el aumento de cada sector”, pero remarcó que “en la actualidad, los aumentos pueden traer riesgos en algunos puestos de trabajo”.