El gobierno del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, aprobó hoy un programa de ajuste fiscal por 24.000 millones de euros con el objetivo de mantener estables las cuentas públicas y alejar los temores a una crisis como la griega.
La reunión del Consejo de Ministros fue precedida por un encuentro extenso entre Berlusconi, el ministro de Economía, Giulio Tremonti, y el subsecretario de la Presidencia del Consejo, Gianni Letta, según un despacho de la agencia italiana de noticias Ansa.
El ajuste lanzado por el gobierno italiano prevé el congelamiento de los salarios de los empleados estatales hasta 2013 y una reducción del 10% de los sueldos de los integrantes del gobierno.
Asimismo, un ajuste fiscal lineal del 10% para todos los ministerios.
Las medidas también comprenden recortes de 7.000 millones de euros a los fondos para las regiones, provincias y municipalidades.
También alienta profundizar la lucha contra la evasión fiscal, con medidas a nivel nacional y municipal.
Según fuentes presentes en la reunión del gobierno, el premier Berlusconi dijo que se trata de una iniciativa que recorta los gastos, ataca la evasión fiscal y no aumenta los impuestos.
El Pueblo de la Libertad, el partido que formó Berlusconi y que está en coalición con la Liga Norte de Umberto Bossi, expresa que se abre una fase de “sacrificios” para los italianos, pero se dice convencido de que las medidas son “equilibradas social y políticamente”.
La Liga de Bossi, protagonista de las últimas elecciones regionales y miembro de la coalición de gobierno conservadora, se muestra predispuesta como mediadora para evitar los cuestionamientos al ministro Tremonti, en el marco de medidas que califica como “duras”.
“Echaré agua al fuego (…) pero estamos listos para hacer sacrificios”, aunque la confianza en Tremonti es “plena” garantizó Bossi.
Italia tiene un déficit fiscal de 5,3% del PIB que el gobierno quiere bajar hasta el tope de 3% adoptado por el Pacto de Estabilidad europeo.
El recorte fiscal por 24.000 millones propuesto por el gobierno equivale al 1,6% del PIB.
Distinto es el caso de la deuda pública, que en Italia equivale al 115% del PIB y supera el 60% contemplado en el Pacto de Estabilidad. (Télam).-